Apenas 46 segundos duró la esperada pelea de la boxeadora argelina Imane Khelif en el peso wélter de los Juegos Olímpicos de París 2024. Su rival en octavos de final, la italiana Angela Carini, abandonó el combate tras un fuerte derechazo en la nariz.
Las imágenes dieron rápidamente la vuelta al mundo, debido a que Khelif ha estado en la mira desde que fue descalificada antes de un combate por la medalla de oro en el Campeonato Mundial de 2023 por incumplir las normas de elegibilidad de la Asociación Internacional de Boxeo (IBA), que impiden a las atletas con cromosomas XY competir en pruebas femeninas.
Sin embargo, la boxeadora sí fue declarada elegible para combatir en París 2024, una competición dirigida por el Comité Olímpico Internacional (COI), después de que este organismo despojara a la IBA de su reconocimiento internacional el año pasado por cuestiones relacionadas con la gobernanza y las finanzas.
Algunos deportes han limitado los niveles de testosterona permitidos a las atletas que participan en competiciones femeninas, mientras que otros prohíben el acceso a todo aquel que haya pasado por la pubertad masculina.
El boxeo está dirigido por el COI después de que se retirara el reconocimiento a la IBA, y no ha actualizado las normas de elegibilidad, sino que ha utilizado las aplicadas en Juegos anteriores.
De esta manera, el COI ha despejado el camino para que Khelif, así como la doble campeona mundial taiwanesa Lin Yu-ting, quien perdió su medalla de bronce en el Mundial del año pasado al no cumplir los criterios por el mismo motivo, puedan competir en los Juegos.
Prueba de género a boxeadora: ¿Cómo funciona?
Las federaciones internacionales y el COI han utilizado diversas técnicas a lo largo de la historia para “verificar el sexo” de las deportistas, incluida —según El Diario de España— la obligación de posar desnudas para un examen visual (1966).
Técnicas que fueron quedando obsoletas cuando a partir de los Juegos Olímpicos de Invierno de 1992 en Albertville, Francia, y tras el descubrimiento del gen SRY (región determinante del sexo del cromosoma Y), en 1990, el COI reemplazó las pruebas del cromosoma X por métodos basados en ADN para detectar material cromosómico Y.
Destacar que, según explica el Instituto Nacional de Investigación del Genoma Humano (National Human Genome Research Institute) de Estados Unidos, el cromosoma X es uno de los dos cromosomas sexuales involucrados en la determinación del sexo. Los seres humanos y la mayoría del resto de los mamíferos tienen dos cromosomas sexuales (X e Y) que en combinación determinan el sexo de una persona. Las mujeres tienen dos cromosomas X en sus células, mientras que los hombres tienen uno X y uno Y.
Es en esta prueba de ADN donde, según la IBA, Khelif presentó, además de altos niveles de testosterona, cromosomas sexuales biológicos masculinos (XY).
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Pero como el COI no reconoce a la IBA como organismo legítimo, y con reglas más laxas que la asociación internacional, anunció que la atleta argelina había sido admitida en París 2024 porque cumplía todos los requisitos.
"Se trata de personas reales", declaró el jueves Mark Adams, portavoz del COI. "Han competido y siguen compitiendo en la competición femenina. Han perdido y han ganado contra otras mujeres a lo largo de los años".