En enero pasado fue la última vez que se registró un sistema frontal en la zona central, el que dejó graves consecuencias en la zona precordillerana de la región Metropolitana (RM). En aquella oportunidad hubo un aumento de caudales y remoción de masas en la zona del Cajón del Maipo, y también cortes del suministro eléctrico en varias comunas.
Desde esa fecha, poco y nada ha sido la lluvia que ha caído en la zona central. Si bien en el último tiempo se ha pronosticado precipitaciones para la RM, lo cierto es que el sistema frontal casi siempre se desvía, lo que provoca que las lluvias no se acerquen a la capital.
Frente a este panorama cabe preguntarse, ¿A qué se debe que un sistema frontal pronosticado para ciertas zonas, luego se desvíe y no genere las lluvia esperada?¿en qué circunstancias es más confiable un determinado pronóstico?
El meteorólogo de Canal 13, Gianfranco Marcone, explicó a T13.cl que depende de varios factores. "Sin considerar el lugar específico, puede deberse a la descarga que haya tenido el frente anteriormente, por ejemplo en el Océano, al cómo ingrese a la costa y vaya enfrentando los distintos accidentes geográficos".
Y agregó: "El anticiclón también tiene mucho que decir, ya que si está muy fortalecido, los frentes se desvían".
La meteorología, una ciencia inexacta
En relación a cómo funciona la meteorología y el entregar un pronóstico que puede variar constantemente, Marcone dijo que si bien es una ciencia inexacta, "no lo es tanto como otras".
"Lo que sucede es que la atmósfera es dinámica, es decir varía día a día y es sumamente importante entender eso y actualizar la información. No podemos quedarnos con lo que vimos en la aplicación del celular, o en la televisión 5 o 3 días antes del evento en cuestión, ya que seguramente eso cambiará, poco o mucho pero cambiará", comentó.
Por lo mismo, aclaró que "siempre el pronóstico más confiable va a ser el que está a menos tiempo del evento que se está pronosticando, es decir idealmente 24 horas antes pero dependiendo la probabilidad alta medía o baja y que tan estable se vaya viendo esa probabilidad".
Marcone mencionó que con 10 días de anticipación algo se puede avizorar y que "más que eso sería un volador de luces". Sin embargo, 5 días antes ya se puede ir dando más luces del evento con probabilidad, día de ocurrencia y zonas específicas "pero siempre actualizando día a día esa probabilidad".
¿Qué tiene la RM que hace que las lluvias se desvíen?
Las lluvias que se anuncian y que luego no ocurren, dejan con varias dudas a los habitantes de la RM, que esperan con ansias algunas gotas de agua.
"Algo está pasando con la ciudad de Santiago que a veces algunas precipitaciones solamente llegan al exterior, a las zonas más rurales y no al centro de la capital", explicó Gianfranco Marcone.
Sobre este punto, Marcone dijo a T13.cl que "en la ciudad de Santiago llueve menos que en otros sectores que se encuentran a una misma o similar latitud, por ejemplo si comparamos Valparaíso, Pudahuel, Quinta Normal y La Reina, son todas ciudades que están a una similar latitud pero a distinta longitud o ubicación oeste en el mapa de Chile".
Y añadió: "Las precipitaciones siempre en promedio es menor en el valle, es decir, en Quinta Normal; y baja también cuando atraviesa la Cordillera de la Costa y llega a Pudahuel por ejemplo y luego aumenta cuando comienza a ascender el frente hacia la cordillera como en La Reina. Ahí tenemos factores como la Cordillera de la Costa que favorece una condición más seca de la cuenca de Santiago".
Ahora, ¿Qué ha pasado los últimos años? Gianfranco explicó que hay una conjunción de dos factores: "Uno de ellos es la baja afluencia de frentes que hemos tenido en la zona central y cuando llegan son débiles, lo que permite que deje algo de agua en la costa y fuera del radio urbano capitalino pero no como para llegar al centro".
"Ahí se confabula con los factores nombrados anteriormente de la sequedad que genera la Cordillera de la Costa. Si secas algo débil, es menos probable que caiga", detalló.
Para criterio del meteorólogo, también existen factores urbanos: la selva de cemento o isla de calor. "Se produce una sequedad de esos frentes que ya vienen débiles de anterioridad. El efecto invernadero que genera la concentración de gases en la cuenca de Santiago contribuye a ser una ciudad más caliente, la configuración de las calles, los edificios, todo eso contribuye a tener un micro clima llamado microclima urbano", cerró.
