Durante esta madrugada y a través de un comunicado de la Arquidiócesis de Puerto Montt, el arzobispo Cristián Caro Cordero, informó su salida de la diócesis y se convierte en la primera renuncia que es aceptada por el Papa Francisco luego que todos los obispos de la país pusieran sus cargos a disposición tras su encuentro en el Vaticano.
"Estando en Santiago para la reunión mensual de la Comisión Nacional de Catequesis, se ha dado a conocer la aceptación, por parte del Papa Francisco, de la renuncia que presenté, por razones de límite de edad, en febrero de 2018", dijo el religioso en la misiva.
"Naturalmente que acepto con fe la decisión del Pastor universal, la cual llega en un momento crítico de la Iglesia en Chile, por la pérdida de la fuerza profética de la evangelización y la 'cultura del abuso y el encubrimiento' (palabras del Papa) que ha causado daños a muchas personas y ha debilitado la credibilidad de la Iglesia. Pero, la crisis es también la oportunidad de volvernos más decididamente al Señor Jesucristo y contribuir –junto con toda la sociedad- a crear una “cultura del cuidado y la protección”, expresó en su declaración pública.
De esta manera, Francisco designó al reverendo Ricardo Morales Galindo, actual Provincial de la Orden de La Merced, como administrador apostólico temporal de la Arquidiócesis de Puerto Montt.