Exclusivo: La declaración de Francisco Javier Errázuriz en el marco del caso Karadima
Leslie Ayala y Pablo Cádiz
22 carillas dan cuenta de la declaración de cinco horas del cardenal Francisco Javier Errázuriz entregada ayer en el marco de la demanda civil interpuesta por tres víctimas del ex párroco de El Bosque, Fernando Karadima, quienes piden $ 450 millones por un supuesto encubrimiento de los abusos sexuales realizado por los religiosos, además de un acto de perdón público.
En su testimonio, al que accedió en exclusiva T13, Errázuriz sostiene que cuando aparecieron las primeras denuncias no las creyó, en buena parte,"porque el derecho canónico pide que uno inicie una investigación cuando llegue una denuncia que a los menos sea verosímil".
A esa época la fama del padre Karadima era extraordinaria, tenía hasta fama de santo, con tal fama lo que era cierto, es decir la denuncia en esa época no la creí
A esto se suma -agrega- que "a esa época la fama del padre Karadima era extraordinaria, tenía hasta fama de santo, con tal fama lo que era cierto, es decir la denuncia en esa época no la creí".
Con respecto al encubrimiento, Errázuriz asegura que "no existe en mi conciencia, memoria de haber encubierto abusos sicológicos sexuales ni ministeriales, ni tampoco existió intento de silenciar o acallar las denuncias".
"Le restaba valor, porque eran denuncias que llegaban sin prueba, además estaba el prestigio de Karadima por una parte, segundo, era difícil asimilar que personas adultas durante años hubieran sido abusadas sin denunciarlo", sostiene en su declaración ante el ministro de la Corte de Apelaciones Juan Manuel Muñoz.
Errázuriz continúa diciendo que "después uno sabe que desde la perspectiva actual de la sicología y entiende que el abusado es incapaz de acusar a su abusador o por lo menos tiene mucha dificultad".
"Pero sin haberse metido nunca en ese campo, además tratándose de personas adultas y habiendo pasado tantos años sin haber hecho acusación, eso me llevo a no asimilar las denuncias en un primer momento", agrega.
Sin pretenderlo, debido a la publicidad de la denuncia, si (hicieron daño a la Iglesia con la denuncia) (...) Sin lugar a dudas el mayor daño lo causó Karadima con sus abusos
Consultado sobre la salida de Karadima de la parroquia El Bosque el cardenal descarta que haya sido una sanción por las denuncias de abusos, argumentando que el derecho canónico "ruega" a todos los párrocos que cumplen 75 años que presenten su renuncia.
"En diciembre de 2005 le pedí que renunciara, no era una destitución, porque no se puede destituir a un párroco sin un juicio canónico, le rogué que presentara su renuncia. El presentó muchos reparos y me costó convencerlo", detalla.
Con todo, el cardenal reconoce que a la fecha tenía conocimiento de las denuncias de José Andrés Murillo y de la madre y esposa de James Hamilton.
"El mayor daño lo causó Karadima con sus abusos"
Errázuriz fue consultado sobre si considera que los denunciantes causaron daño a la Iglesia Católica. Ante esto el cardenal sostuvo que "sin pretenderlo, debido a la publicidad de la denuncia, si".
Según sostuvo, las denuncias han "dañado su confiabilidad, sin afirmar que se le haya querido dañar, el hecho de referirse públicamente al arzobispo de Santiago como criminal y ecubridor, la dañaba".
Ante la pregunta si no cree que el daño a la Iglesia fue producto de los abusos de Karadima más que de los denunciantes, Errázuriz sostuvo que "sin lugar a dudas el mayor daño lo causó Karadima con sus abusos".
Por otro lado, Errázuriz reconoció que la "lentitud" en que se actuó frente a las denuncias provocó daño en los dos primeros denunciantes, Murillo y Hamilton.
"No así en los denunciantes siguientes, ya que se actuó rápidamente para investigar y juzgar", dice el cardenal en alusión a Juan Carlos Cruz y Fernando Batlle.