Héctor Llaitul dice que el “crimen organizado” está detrás del triple homicidio de carabineros en Cañete
Qué observar. Este martes, día en que se conoció la condena a 23 años de cárcel al líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM) Héctor Llaitul, Le Monde Diplomatique publicó una entrevista al cofundador del grupo radical activo más antiguo del país.
- El tribunal oral en Lo Penal de Temuco lo sentenció a 15 años de prisión por infracción a la ley de Seguridad del Estado, 5 por hurto de madera y 3 por atentado contra la autoridad. Por el delito de usurpación violenta, fue condenado a pagar una multa.
- De rechazarse el recurso de nulidad que anunció su defensa, Llaitul, de 56 años, dejaría la cárcel con 77 —23 años, menos los casi 2 que pasó en prisión preventiva—, si cumple toda su sentencia en un recinto penal.
- En la entrevista —realizada por la periodista Carolina Trejo, quien moderó el relanzamiento en Peñalolén del libro Chem ka Rakiduam de la CAM en agosto de 2022— Llaitul reiteró que había una persecución política en su contra.
- También descartó que la CAM estuviera involucrada en el triple homicidio de carabineros en Cañete del 27 de abril, en que 2 cabos y un sargento murieron baleados cuando iban a revisar el cumplimento de una medida cautelar. Tras el asesinato, sus cuerpos fueron trasladados de lugar y quemados en la ruta P-72-S.
- La acción, dijo, “debe ser situada en el crimen organizado”.
La transcripción de las conversaciones de Llaitul que pavimentaron su condena a 23 años de cárcel
El triple homicidio. En la entrevista, realizada previo a conocerse la sentencia, Llaitul explicó por qué la CAM guardó silencio tras el triple homicidio, a diferencia del grupo radical Weichan Auka Mapu (WAM), que publicó una declaración en el sitio de Radio Kurruf desligándose del crimen.
- “No hubo ni siquiera que sacar pronunciamiento, ya que no hubo una postura clara en tratar de acusarnos. Porque es nuestro pueblo Mapuche el que tiene absolutamente claro qué tipo de acciones desarrollamos. Así también lo tiene claro la clase política y la opinión pública nacional e internacional”, dijo, en referencia a que los blancos que la CAM declara como aceptables son las máquinas forestales.
- En las transcripciones de interceptaciones de audio de la carpeta de investigación también mencionó, sin embargo, que respondían con armas de fuego a Carabineros.
- “Como CAM, hacemos un deslinde categórico y firme frente a hechos que no contribuyen a la causa Mapuche. Al contrario, los únicos que sacan rédito de esto son las forestales y las fuerzas políticas de la ultraderecha”, dijo.
- “Una acción de estas características no puede ser endosada a la causa Mapuche y debe ser situada en el crimen organizado y las mafias ligadas al poder en la zona, las que nunca han sido perseguidas por la institucionalidad chilena”, dijo Llaitul, sin precisar a qué grupos de crimen organizado se refería.
- “Inclusive, deben ser situadas en el rol que vienen cumpliendo sectores de la ultraderecha ligados a los intereses de las forestales, quienes han formado equipos paramilitares que han actuado en completa impunidad”, añadió, sin entregar antecedes que sustentaran sus dichos.
La historia de la caída de Héctor Llaitul, el líder de la CAM que hoy podría ser sentenciado a 25 años de cárcel
“Persecución política”. Respecto del juicio en su contra dijo que “lo que nosotros observamos es el desarrollo capitalista sin freno, y que hoy día tiene incluso una salvaguarda de parte de este gobierno que se declaró más democrático o progresista, como una suerte de alternativa, pero que ha mostrado una defensa irrestricta del modelo de desarrollo forestal”.
- “De hecho, durante el juicio en mi contra, la posición de los fiscales y querellantes fue muy clara en la defensa del desarrollo capitalista forestal, aunque nieguen que hubo persecución política”.
- Esto permitió, dijo, “una condena política que se inscribe en la arremetida contra el movimiento autonomista Mapuche para consolidar los diversos procesos de reacomodo de gran capital en las zonas de conflicto”.
- “Con fuerzas de elite y con tácticas de todo tipo que implican, a su vez, tecnicismos de todo orden en materia judicial cuando se dan los procesamientos (…), se busca la condena de los weichafe (combatientes) más destacados”.