AFP
El cuadro "Head of a Young Woman", de Pablo Picasso, propiedad del banquero Jaime Botín, de un valor estimado en más de 25 millones de euros y declarado inexportable por las autoridades españolas, fue incautado el pasado viernes en un barco anclado en la isla de Córcega, anunció este martes a la AFP el servicio de aduanas francés.
Un "intento de exportación a Suiza desde la oficina de aduanas de Bastia (noreste de Córcega) de un cuadro de Picasso, 'Head of a Young Woman'", el pasado jueves, llamó la atención de los funcionarios franceses, explica la aduana francesa en un comunicado.
Al día siguiente, los agentes de aduanas de Calvi (noroeste de la isla mediterránea) "se personaron a bordo del barco que transportaba la obra, atracado en el puerto deportivo" de la ciudad corsa, y reclamaron los "documentos relativos a la situación del cuadro", prosigue el texto.
"El capitán del barco sólo pudo presentar un documento de evaluación de la obra y una acta de sentencia redactada en lengua española, de mayo de 2015, que emanaba de la Audiencia Nacional española y confirmaba que se trataba de un tesoro nacional español que en ningún caso podía salir de España".
Dicho cuadro, "de un valor estimado en más de 25 millones de euros", según el servicio de aduanas, es propiedad de Jaime Botín, célebre banquero español cuya familia participó en 1857 en la fundación del Banco Santander, hoy en día primer grupo bancario español.
Jaime Botín, de 79 años, vicepresidente del Santander entre 1999 y 2004, máximo accionista actual de Bankinter, no se encontraba a bordo del barco, de pabellón británico y propiedad de una sociedad de la que es accionista, precisó a la AFP un portavoz de la aduana.
La solicitud de exportación registrada en Bastia no figuraba a su nombre, indicó también.
Una primera solicitud fue presentada en diciembre de 2012 en España para exportar definitivamente del país el cuadro, con destino a Londres.
El ministro de Educación, Cultura y Deporte se opuso entonces y en 2015 la Audiencia Nacional confirmó la "inexportabilidad" de la obra por pertenecer a los "bienes de interés cultural" que no tienen derecho a abandonar el territorio nacional.
Las autoridades francesas esperan ahora la eventual reclamación de España para recuperar la obra, perteneciente al periodo del pintor malagueño, a la sazón de 24 años, en el pueblo leridano de Gósol (un centenar de cuadros pintados el verano de 1906), decisivo para el posterior desarrollo del cubismo.