AFP
"El cuerpo del ciudadano norcoreano que murió en Malasia (...) fue repatriado hoy vía Pekín", anunció el portavoz del ministerio chino de Relaciones Exteriores, Lu Kang.
Los restos de Kim Jong-Nam, asesinado el 13 de febrero en el aeropuerto de Kuala Lumpur tras años de rivalidad con su medio hermano, dejaron Malasia con dirección hacia China.
La repatriación del cadáver constituye un epílogo a la crisis de un mes y medio entre Malasia y la dinastía de los Kim.
Kim Jong-Nam, muy crítico con su medio hermano, vivía en el exilio cuando fue envenenado con VX, un agente nervioso, una operación que recuerda e los asesinatos por encargo durante la Guerra Fría.
Seúl culpó a Pyongyang de su muerte, pero Corea del Norte negó estas acusaciones y nunca confirmó la identidad de la víctima, que llevaba un pasaporte con el nombre de Kim Chol cuando fue atacado.
El jueves el primer ministro malasio, Najib Razak, anunció que nueve malasios retenidos en Corea del Norte fueron autorizados a volver a Malasia, apaciguando la crisis política.