El presidente francés Emmanuel Macron denunció el jueves el "cinismo al final de cada discusión" con su homólogo ruso Vladimir Putin y afirmó que este rechazó explícitamente una operación humanitaria en Mariúpol, en el sureste de Ucrania.
"Este papel de diálogo con el presidente ruso es ingrato, paso horas discutiendo. El cinismo está al final de cada discusión, no hay jamás placer... Pero es mi deber", respondió en una sesión con lectores del periódico francés Le Parisien.
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Macron también aseguró que Putin presentó "un rechazo explícito" a una operación humanitaria propuesta por Francia para evacuar a civiles de Mariúpol, ciudad asediada en el mar de Azov.
El ministerio de Defensa ruso había indicado que estas acusaciones del gobierno francés eran "absurdas" y que ellos estaban dispuestos a permitir corredores humanitarios.
Pero, según Macron, "el poder ruso escoge la gente que sale para llevarlas a Rusia (...) No es, pues, una operación humanitaria".
En medio de la campaña electoral para las presidenciales de este mes, Macron arremetió contra el primer ministro polaco Mateusz Morawiecki, que lo había criticado por dialogar con Putin, calificándolo de "antisemita de extrema derecha que prohíbe a los LGTB".
En la víspera, ya lo había acusado de "inmiscuirse en la campaña política francesa" señalando su afinidad con la candidata de extrema derecha y principal amenaza para Macron, Marine Le Pen.