Han pasado casi dos meses desde que Kate Middleton se sometió a una cirugía abdominal, el pasado 16 de enero, y su estado de salud continúa siendo un enigma. Además, la preocupación por la princesa de Gales aumentó luego de que esta semana el príncipe William se retirara de un acto público por un “asunto personal”.
La última aparición pública de la princesa fue el pasado 25 de diciembre, en la caminata anual a la iglesia de Sandringham para el servicio matutino de Navidad junto a su familia.
“El príncipe William dijo que Kate tenía dos enfermeras filipinas cuidándola que fueron increíbles y amables”, escribió en LinkedIn Patricia Spruce, quien fue una de las personas honradas con un reconocimiento entregado por el príncipe de Gales y quien reveló detalles sobre la estancia de Kate Middleton en el hospital.
Esto era lo último que se sabía de la princesa, lo que sumado a la retirada imprevista del príncipe esta semana, comenzó a levantar sospechas. Algunas personas han llegado a exigir a través de las redes sociales alguna prueba de vida de Kate, incluso sosteniendo el periódico del día para acreditar la fecha.
Una teoría, difundida por la periodista española Concha Calleja, quien aseguró haber hablado con una fuente al interior de la familia real, sostiene que Kate sufrió graves complicaciones después de la cirugía, lo que requirió acciones “drásticas” para salvar su vida. “La decisión fue ponerla en coma inducido”, señaló la periodista al programa de noticias español Fiesta. “La tuvieron que intubar”, añadió.
Ante el sinfín de comentarios en las redes y las afirmaciones de Calleja, el Palacio de Kensington intervino y calificó estas últimas como “absurdas tonterías” y “ridículas”, publicó este jueves The New York Times.
La canción que no logró ganar el Festival de Viña y que Frank Sinatra terminó convirtiendo en todo un hit
Un representante de Middleton complementó este jueves, en declaraciones a Page Six, que “el Palacio de Kensington dejó claro en enero los plazos de recuperación de la princesa y que solo proporcionaríamos actualizaciones significativas”, agregando que “esa orientación se mantiene” y que Kate “está bien”.
