El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, protagonizó una nueva polémica al defender el trabajo infantil durante una actividad organizada por la Asociación Brasilera de Bares y Restorantes en Brasilia.
Según publica O Globo, el mandatario recordó que su primer trabajo fue cuando tenía 10 años en un bar. No tenía contrato. Estudiaba durante las mañanas y trabaja en las tardes.
"Buenos momentos, ¿no?, donde un menor de edad podía trabajar. Hoy, puede hacer cualquier cosa menos trabajar", señaló.
No es la primera vez que Bolsonaro defiende el trabajo infantil, en julio del año pasado afirmó: "Miren, trabajar en el campo a los 9 o 10 años no me perjudicó en nada. Cuando un niño de 8 o 9 años de edad trabaja en algún lado muchos denuncian el 'trabajo forzado' o el 'trabajo infantil'. Pero si ese niño fuma pasta base nadie dice nada".
En esa oportunidad aseguró que "el trabajo dignifica a los hombres y las mujeres, poco importa su edad".
La legislación brasileña prohíbe el trabajo de los menores de 16 años, excepto para los aprendices, que pueden comenzar a los 14. Según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (IBGE), cerca de 2,5 millones de niños y adolescentes de entre 5 y 17 años trabajan en Brasil.