Es hora de hacer algo contra el acoso sexual en el trabajo.
Esa es la meta de una nueva campaña lanzada por más de 300 mujeres de la industria del cine, la televisión y el teatro, entre ellas, Natalie Portman, Meryl Streep o Eva Longoria.
La iniciativa, denominada Time's Up, o "Se acabó el tiempo", ya reunió US$13 millones en donaciones para un fondo de defensa legal para mujeres y hombres que sufran acoso, especialmente aquellos con menos recursos.
"A cada mujer empleada en agricultura que tuvo que aguantar los insinuaciones sexuales no deseadas de su jefe (...), cada inmigrante silenciada por la amenaza de que, si habla, revelarán que es indocumentada, y para todas las mujeres sometidas a comportamientos indignos y ofensivos que se supone que deben tolerar para ganarse la vida: estamos con ustedes, las apoyamos", indican sus promotoras.
La campaña está inspirada por una carta de la Alianza Nacional de Campesinas.
La asociación de trabajadoras agrícolas escribió el año pasado a las artistas de Hollywood que denunciaron abusos sexuales para expresar su solidaridad y destacar que muchas de ellas también son víctimas de estas situaciones a diario.
Escándalos
El proyecto "Se acabó el tiempo" es definido como "un llamamiento al cambio" por parte de mujeres del mundo del entretenimiento a mujeres "de todas partes".
La campaña se produce tras las graves acusaciones de abuso sexual por parte de renombradas actrices contra el conocido productor cinematográfico Harvey Weinstein.
El caso Weinstein fue el punto de partida de una serie de casos que sacudieron éste y otros sectores del país.
En internet, el hashtag #MeToo (#YoTambién) se convirtió en un fenómeno global, que inspiró a mujeres y hombres de todo el mundo a compartir sus historias.
Entre octubre y diciembre del año pasado, esa "etiqueta" virtual fue utilizada en Twitter y en Facebook más de seis millones de veces.
Apoyo legal
En su carta abierta de "solidaridad", las creadoras de "Se acabó el tiempo" consideran en su página web que la "lucha de las mujeres por ascender o simplemente ser escuchadas" debe terminar.
"Se acabó el tiempo de este monopolio impenetrable", añade la misiva.
El acoso continúa en muchas ocasiones porque "los perpetradores y empleadores nunca se enfrentan a las consecuencias", consideran las promotoras del proyecto.
Por ello, pusieron en marcha el fondo de ayuda legal que principalmente está dirigido a aquellos que no se pueden pagar una defensa para combatir los abusos, como empleadas agrícolas, de fábricas o cuidadoras.
La iniciativa también promueve la igualdad salarial y una legislación que penalice a las empresas que toleran el acoso.