Son la gran promesa pendiente de Google. Sus lentes inteligentes, llamados Glass, fueron anunciados hace dos años, el 2013 se vendieron sólo a los desarrolladores y muy entusiastas de la tecnología. Pero hasta ahora, sólo lo poseen un puñado de personas.
El próximo año llegará una nueva generación de Google Glass, con un procesador más rápido y, más importante aún, con una duración de batería mucho mayor, según el Wall Street Journal.
Según Intel, fabricante del nuevo cerebro de estos lentes, los nuevos Glass llegarán a más tiendas, ampliando su audencia actual, compuesta en su mayoría por entusiastas de la tecnología con dinero, ya que cuestan 1.500 dólares, unos 915 mil pesos.
Eric Johnsen, quien trabajó en el desarrollo de este producto, le confirmó al diario estadounidense la nueva versión con mayor duración de batería, la que ha sido muy criticada, ya que no alcanza a durar un día con un uso promedio.
Esta novedad se contrapone al cierre hace unos días de algunas tiendas físicas donde se vendían estos lentes, los que ya no atraían a tanta gente como hace un par de años. Habrá que ver si se consolida o si estos aparatos futuristas sólo quedarán apenas como un buen experimento.