"¿Qué pasó con los goles?": Revelan nuevos detalles a 14 años del disparo en la cabeza a Salvador Cabañas
AFP - Salvador Cabañas
El 25 de enero de 2010 es un día que los fanáticos del fútbol difícilmente olvidarán. Hace poco más de 14 años, Salvador Cabañas, quien defendió los colores de Audax Italiano en nuestro país, recibió un disparo en la cabeza en el baño de un club nocturno de Ciudad de México. De milagro la bala no le arrebató la vida, pero truncó la carrera de uno de los futbolistas paraguayos más exitosos de todos los tiempos.
Y recientemente en México el conductor de Telediario, Carlos Jiménez, dio a conocer nuevos detalles sobre el ataque que sufrió “Chava” y que lo obligó a dejar el fútbol a los 30 años.
Mientras era jugador del América, Cabañas tuvo un encuentro con José Jorge Balderas Garza, alias “JJ”, a quien no conocía hasta el momento del ataque, en el baño del pub Bar Bar. “JJ”, narcotraficante del cartel de los Beltrán Leyva, fue condenado a prisión.
“Todo mundo ahí sabía que era parte del grupo de los Beltrán Leyva (JJ). Todos conocían que él andaba siempre con otros de los Beltrán Leyva, que era la ‘Barbie’, que era jefe de los sicarios, ellos estaban ahí. Entonces se para Salvador Cabañas, entra al baño, y entra el ‘JJ’ atrás de él, adentro del baño está una persona que limpia el baño, está Cabañas y está el ‘JJ’”, relató el comunicador mexicano, según publicó As México y otros medios del país norteamericano.
“Según lo que declara el trabajador, que es la versión que queda oficialmente establecida por la autoridad, llega el ‘JJ’ y le dice: ‘¿Qué pasó con los goles, por qué no has anotado?’. Cabañas se molesta y se hacen de palabras y el ‘JJ’ saca la pistola y le apunta a Cabañas, a lo que Salvador le dice: ‘Jálale, a ver si es cierto’ y el ‘JJ’, en el nivel de poder que sentía que tenía, le jaló y le dio un tiro a la cabeza”, agregó.
Sobre por qué, de milagro, la bala no le quitó la vida al entonces exitoso delantero, Jiménez comentó que “él tenía una pistola de calibre pequeño y es gracias a eso que no muere. La bala entra, choca en el cráneo, hace un recorrido y se va para atrás, no lo mata, pero sí lo daña”.
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