La noche del martes en “De tú a tú”, Martín Cárcamo llegó hasta la comuna de Colina, donde el chef francés Yann Yvin vive hace tres años, en un cerro con una amplia vista a las montañas.
El cocinero, que será jurado en la nueva temporada de "MasterChef Celebrity" de Canal 13, comenzó diciendo: “Aquí vivo solo, es mi nido, muy pocas personas lo conocen. Todo a mi pinta: son mis cuadros, son mis detalles, son mis objetos, son mis recuerdos de todos los viajes. Solo, solo, todo lo hago yo”.
En la instancia, le contó a Martín que la cordillera chilena lo salvó, que todos los días camina unos 40 minutos hasta un árbol que se ve a lo lejos desde su casa para sentarse a meditar. Y cuando está de ánimo, sube a la punta del cerro para gritar. “Es súper liberador gritar…es genial”.
Tras hablar de sus terapias, Yann pasó a mostrar algunas cosas de su casa, como el juego de té que tiene de “El Principito”, admitiendo que él es un gran seguidor de la filosofía del famoso libro. “Al final es una manera de pensar más con el corazón que con la cabeza… Eso es un mensaje para el próximo Presidente de Chile, que tenga la cabeza a la derecha pero un corazón enorme a la izquierda”.
Luego, Martín pasó a conocer la humilde cocina del chef. “Es matemático: menos tenemos cosas, menos problemas tenemos. Entonces la idea hoy día es justamente deshacerse del materialismo que invade la vida. Chile es muy de tener cosas, de tener un auto así (grande), una casa así. Lo que ves aquí es lo que tengo, la casa no es mía. No tengo ninguna cosa material aquí y por eso me siento realmente liviano. Soy nómade, soy un chef del viaje. Quizás me voy a quedar en Chile para siempre, pero necesito saber que puedo viajar”, señala el cocinero.
Al pasar a la terraza, el chef contó que religiosamente se baña todas las mañanas al desnudo en un Hot Tub (tinaja) con agua helada. “Te aseguro que aquí todo el mundo conoce mi poto”, dijo riendo.
Yvin aseguró que los chilenos no aprecian lo que tienen, indicando que “Chile está lleno de mini paraísos, de norte a sur… Soy un fanático de Chile en términos de lo que ofrece. Me da rabia cuando veo a la gente que gasta la misma cantidad de plata para ir a un mall a Miami. Me duele”.
Sobre el miedo de vivir solo en un lugar tan aislado, el francés dijo que era algo que no le preocupaba, a pesar de que tuvo un ataque al corazón en el set grabando “El discípulo del chef”. En esa oportunidad le diagnosticaron hipertensión y se medica todos los días. “Si tengo un infarto aquí, chao no más”, cerró.