WhatsApp ha vivido una serie de cambios en su plataforma, apuntando principalmente a la mejora de la experiencia del usuario, como también en la búsqueda de reencantar a quienes dejaron la aplicación luego del fallido cambio de políticas y condiciones de uso, en el que los internautas reclamaban una vulneración de sus datos.
Ante esto, y la fuga de usuarios, la compañía decidió echar pie atrás y dejar todos los anuncios sin efecto.
Sin embargo ahora la aplicación de mensajería vive días complejos luiego que el organismo de control de protección de datos irlandés emitiera una multa de 225 millones de euros, la segunda más grande en la historia sobre protección de datos.
Según publicó la BBC "WhatsApp está apelando contra la multa, pero está modificando sus documentos de política en Europa y el Reino Unido para cumplir".
Además la publicación señala que desde la empresa detallaron que estos cambios sólo aparecerán en la versión europea de la política de privacidad, que ya es diferente de la versión que se aplica en el resto del mundo.
"No hay cambios en nuestros procesos o acuerdos contractuales con los usuarios, y los usuarios no estarán obligados a aceptar nada ni a tomar ninguna acción para seguir usando WhatsApp", indicaron desde la red social, la cual trabaja bajo el alero de Meta, ex Facebook Inc.
Estas modificaciones entraron en vigencia de inmediato.