Irene O'Shea, una bisabuela de 102 años, se convirtió en la paracaidista más anciana del mundo.
La mujer saltó desde más de 4.300 metros de altura en el sur de Australia, e indicó que se sentía "normal" tras haber experimentado una caída libre a más de 220 kilómetros por hora.
Irene realizó su primer salto en 2016, el día en que cumplió 100 años, pero recién este domingo logró llegar al libro Guinness de los Récords, donde quedó registrada como la paracaidista más anciana del planeta, con 102 años y 194 días.
O'Shea llevó a cabo su tercer salto como una forma de recaudar fondos para una organización benéfica que investiga la cura de una enfermedad de la neurona motora, que causó la muerte de su hija.
Revisa el salto de la bisabuela a continuación:
