Cuando se trata de Navidad, es imposible no hablar del Viejito Pascuero (Santa Claus o Papá Noel, como es llamado en otros países), figura ampliamente reconocida a nivel mundial y que según la tradición, se encarga de repartir regalos a los niños del mundo a bordo de su trineo mágico arrojado por 8 renos.

Puede que existan algunas diferencias, pero si le pedimos a las personas que describan la figura de Santa Claus, lo describirán como un hombre de edad, gordo, barbón y que viste un abrigo y gorro rojos. 

Esta descripción calza perfecta para como se vive la Navidad en el hemisferio norte, donde se encuentran en pleno invierno e incluso, algunas zonas viven las llamadas "noches blancas" con verdaderas tormentas de nieve.

En el caso de Chile, es todo lo contrario. De hecho, la Navidad en la zona central del país se vivirá con alertas por altas temperaturas extremas, las cuales incluso podrían hasta 39°.

Por ello, la imagen de un Viejito Pascuero, abrigado y preparado para la nieve, dista mucho del presente que se vive en este lado del mundo.

El Viejito Pascuero "chileno" imaginado por Themo Lobos:

Aun así, hace más de 55 años, el fallecido dibujante e historietista chileno, Themo Lobos, padre de personajes como Ogú, Mampato, entre muchos otros, publicó una historieta en donde se imaginó un Viejo Pascuero "a la chilena" y muy especial.

Se trata de la historieta "Cuento de Navidad" publicada en la revista Mampato en 1968, la cual habla de un niño llamado Pedrito, quien vive en una familia muy modesta y no tiene zapatillas para jugar fútbol con sus amigos.

De hecho, uno de los niños del grupo lo discrimina y lo llama "patipelado".

Por ello, y al percatarse que sus padres no tienen dinero para comprarle zapatillas, Pedrito decide escribirle una carta al viejito pascuero para pedírselas y así, no molestar a sus padres.

Sin embargo, es aquí donde viene uno de los momentos más conmovedores de la historieta y es que su padre le dice que es "difícil" que el Viejito pueda pasar por su casa y que, quizá, él le pueda comprar las zapatillas el próximo año. Si bien el pequeño logra entenderlo, lo hace derramando una lágrima.

El niño, de todas maneras, deja la carta a Papá Noel en su ventana, esto con la esperanza de que él venga y pueda cumplir su deseo.

Ya el día de Navidad, mientras Pedrito duerme, es despertado por un ruido de cascabeles. Al abrir la ventana, se encuentra frente a frente con el Viejito Pascuero, pero no de la manera que él se imaginaba.

Aparece ante él un anciano montando un caballo blanco, vistiendo una chupalla, un poncho color rojo y chalas. "¿No conoces al viejito pascuero?", le dice.

Pedrito le pregunta por su trineo, los renos, las botas y su traje, a lo que el ícono navideño le responde que "eso se usa en Europa, donde nieva".

"Vestido así, aquí me moriría de calor, en estas tierras es más práctico el caballo", le dice.

"Además, es el hemisferio norte, le corresponde a mi hermano, Santa Claus o Papá Noel, como le llaman. Yo me encargo del sur, vengo del polo sur", complementa.

Finalmente, el Viejito Pascuero le entrega a Pedrito no solo sus zapatos de fútbol, sino también medias, pantalones nuevos y una pelota nueva.

A pesar de los años de la publicación de esta historia, fue subida a la plataforma Imgur por lo que puede accederse y leerse de forma íntegra.

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