El Solar Impulse 2, un avión que funciona con energía solar, está a punto de iniciar el próximo tramo de su travesía: volar de China a Hawái.
Su objetivo es convertirse en el primer aeroplano impulsado por el sol en darle la vuelta al mundo.
Pero su piloto sólo puede dormir 20 minutos en ciertos momentos a lo largo del día. ¿Es esto saludable?
Durante cinco días y cinco noches volará solo sobre el Océano Pacífico, tomando unas 10 o 12 siestas que durarán 20 minutos.
Dejará conectado, pero sin supervisión, el piloto automático de la aeronave.
Quien piloteará el avión ha sido entrenado en "autohipnosis", lo que supuestamente le permitiría al cuerpo recuperarse gracias a un estado de relajación profunda que, a su vez, ayudaría a que el cerebro se mantuviera alerta al estar despierto para poder controlar los instrumentos de navegación del avión.
¿Tiempo mínimo de descanso?
Pero Kevin Morgan, profesor de psicología del Centro de Sueño de Loughborough, en Inglaterra, Reino Unido, advierte que al menos se necesita media hora para que una siesta logre que el cuerpo se recupere.
Y para que se complete un ciclo de sueño completo, se requieren 90 minutos.
Los integrantes del grupo British Ocean Reunion, que pretende atravesar el Océano Atlántico a remo a finales de este año, utilizará un sistema alternativo que consiste en que una persona duerma por dos horas mientras la otra está a cargo de los remos.
Según Morgan, al piloto del Solar Impulse 2 le convendría más replicar este modelo para descansar.
El psicólogo compara su situación con la de un médico principiante en el Reino Unido de la década de los 80. Tenían su propia habitación en el hospital, pero tenían que estar a disposición permanente durante 48 horas.
"Terminaban sintiéndose destrozados. Al sumar el tiempo que dormían, totalizaban unas cinco o seis horas de sueño, nada mal. El problema es que lo acumulaban en períodos de 10 o 20 minutos", explica Morgan.
Más ejemplos
Cuando Ellen MacArthur navegó sola alrededor del mundo en el año 2000, dormía aproximadamente 5 horas y media al día en lo que llamaba "rebanadas de 20, 40 o 70 minutos".
Es muy probable que el piloto del Solar Impulse 2 experimente "microsueños", también conocidos como cabeceos, muy peligrosos para los conductores, afirma David Ray, profesor de medicina y endocrinología de la Universidad de Manchester, en Inglaterra.
El siguiente tramo de vuelo del avión lo llevará de China a Hawái.
Opina que no son lo ideal para estar pendiente adecuadamente de los instrumentos de vuelo, pero tampoco es tan riesgoso.
En un experimento realizado por la Agencia Espacial Estadounidense (NASA), los pilotos que tomaron siestas de entre 40 y 45 minutos mejoraron su rendimiento en 34% y su nivel de alerta en 54%.
Pero esto fue en vuelos de larga distancia regulares, no en uno con un patrón de vuelo y sueño de cinco días.
El veredicto
Entonces, ¿podría esta odisea ocasionar algún daño a largo plazo?
"El riesgo principal es que en esos cinco días, al estar sometido a un estado de privación de sueño, el piloto pueda cometer un error o que su proceso de toma de decisiones no sea bueno", afirma Ray.
Y concluye: "En un caso como ese, la persona se puede recuperar después de un tiempo, con unas cuantas noches de sueño reparador. Pero pasar por esa situación, no es nada agradable".