Las vacaciones, son sin duda, la fecha del año que todo esperan para poder descansar del ajetreado día a día y poder relajarse.
Sin embargo, no siempre las vacaciones son como uno las soñó. Así le ocurrió a una mujer de 65 años, que sufrió unas 200 picaduras de chinches tras quedarse en un hotel.
Se trata de Sharon Haslam de 65 años, quien decidió pasar unos días de descanso en el Hotel Calypson en Blackpool, Inglaterra, junto a una amiga el pasado 8 de septiembre. Pagaron 170 libras esterlinas, unos 193 mil pesos chilenos, por dos noches.
Todo iba bien hasta que pasaron la primera noche. En la mañana, Sharon despertó con sangre en sus sábanas y una chinche desplazándose sobre la cama. Se revisó y había sufrido unas 200 picaduras durante toda la noche.
El problema es que a más de un mes del incidente algunas picaduras no se han ido e incluso han empeorado: “Algunas de las picaduras se han convertido en marcas moradas. No sé si se irán; creo que me marcarán todo el brazo. Ya llevamos cuatro semanas y todavía tengo una gran marca roja en la cara, debajo del ojo”, explicó a The Mirror.
Debido a moretones que se le crearon en la piel por las mordeduras, a Sharon le recetaron fuertes antibióticos, antihistamínicos y cremas para evitar que las picaduras se infectaran. Además, cuando volvió a su casa, su esposo debió atar la ropa de su equipaje en bolsas herméticas para después ponerla a lavar.
El hotel y la plataforma donde hizo la reserva le devolvió todo el dinero que había pagado a Sharon junto con otras 100 libras, 113 mil pesos chilenos, por las molestas. Igualmente, desde el Hotel Calypson admitieron que habían recibido quejas por presencia de chinches pero que solo dos días antes de la llegada de Sharon habían hecho una revisión en las habitaciones sin encontrar evidencias de la presencia de estos bichos.