Se dice que los padres son capaces de hacer cualquier cosa por sus hijos y esto fue lo que justamente hizo Jamie Morales para salvar a su pequeña hija de un año del ataque de dos pitbulls.
La mujer tuvo que apuñalar a sus propias mascotas ante el ataque de éstos a la niña: "¡Mi hija iba a morir!", declaró ella al medio local KTLA.
Margaret Morales, la abuela de la pequeña, dijo a ABC 7 que ella entró a la cocina y se encontró a dos de sus hijas y otro hijo sobre el suelo tratando de sacarle los perros de encima a la menor.
"Por fin mi hija se levantó y ahí fue que vi a mi nieta. El perro mordía con fuerza su pierna izquierda. Yo metí mis manos entre sus mandíbulas, las abrí y entonces soltó a la niña", reveló entre lágrimas.
Asimismo, señaló que no resultó ilesa, ya que uno de los perros le mordió la mano y se la dejó destrozada.
Fue en medio del ataque que la madre de la niña, quien sufrió mordeduras en su cara, agarró un cuchillo y apuñaló a los perros, llegando a causar la muerte de uno de ellos. "Tuve que hacerlo", se lamentó y agregó: "Era él o mi hija y elegí a mi hija".
Cabe mencionar que la pequeña fue atendida en Los Angeles County USC Medical Center, donde recibió varias cirugías. Una de sus tías también fue herida durante el ataque.
Por otra parte, NBC Los Ángeles consignó que el perro que sobrevivió fue llevado al control de animales, donde será sacrificado.