El matrimonio entre la famosa empresaria Kim Kardashian y el cantante Kanye West planea aumentar los integrantes de su familia. Por esa razón, decidieron contratar a una madre de subrogación para tener su tercer bebé, según informó la revista People.
La pareja ya tiene dos hijos, North West de cuatro años y Saint de un año.
Luego de que la empresaria fuese asaltada a mano armada en París en 2016 y una crisis emocional que afectó al cantante, se especuló que la familia podría haber enfrentado algunos problemas. Sin embargo, la decisión de conseguir un vientre de alquiler parece disipar estos rumores.
Kardashian se ha manifestado en diversas ocasiones -principalmente en su progrema de televisión Keeping Up With The Kardashians en canal E! - que espera con ansias tener más hijos. Sin embargo, reveló que su segundo embarazo fue riesgoso, por lo que los médicos anunciaron que si volvía a quedar embarazada, su salud podía correr serios riesgos.
De acuerdo con la revista People, Kardashian señaló que "no quisiera otra cosa que poder aumentar mi familia y saber que tengo un mundo en mi casa que está seguro". En esa oportunidad agregó que "fue complejo y traumante cuando el médico debió introducir su mano para remover la placenta durante mi primer embarazo", por lo que la decisión de arrendar un vientre ahora la dejaba mucho más tranquila.
