John y Alex Sanders estaban relajándose hace unos meses al interior de su casa. Sin embargo, como tenían la puerta abierta, tuvieron una visita inesperada.
Era un gato, que entró como si nada y se comportó como si fuera su casa.
¿Su nombre? Tiger y tenía una familia, que vivía muy cerca de ese hogar. Por lo mismo, los Sanders se contactaron con la familia y lo devolvieron.
Pero eso no paró ahí.
“Regresó al día siguiente y todos los días desde entonces”, dijo Sanders a The Dodo.
Desde ese día, el pequeño felino se escapa de su casa al menos dos veces al día y llega donde los Sanders para, incluso, pasar la noche.
Eso pese a que intentaron entrenarlo para que retornara a su casa durante las noches, pero no hubo caso.
“El horario autodirigido de Tig es el siguiente: solía ser solo de noche entre las 9 y las 11 de la noche, y pasaba la noche. Alex lo dejaría salir cuando ella fuera a tomar café”, dijo John.
Además, afirmó que “ahora que estamos en casa por el COVID-19, él visita entre 12-2, 4-6 y todavía regresa durante la noche. Hay días en que no lo vemos, pero eso es raro. Por lo general, lo vemos dos veces al día sin falta”.
"Sus padres han dicho que Tig realmente hace lo que quiere y nos ha elegido (…) han dicho que están contentos de que él sea cálido y seguro y que no deambule por las calles", dijo Sanders.
