De acuerdo a lo que informó la revista estadounidense People, Kim Kardashian y Kanye West estarían esperando a través de un vientre de alquiler a su cuarto hijo.
Este 2019 el clan familiar se agrandaría luego del futuro nacimiento de su pequeño, el que se sumaría a North West (5), Saint West (3) y Chicago West (1), que nació hace casi un año también por la vía de subrogación.
La socialité habría optado por este método porque sufre de placenta retenida, lo que pone en peligro la vida del bebé y la suya si es que gestaba de manera natural. De hecho, con los dos primeros hijos sufrió severos problemas de salud tanto en el periodo de embarazo como en el parto.
Según explican fuentes cercanas al clan más famoso de Estados Unidos, la pareja eligió a la misma mujer que tuvo a su última hija, nombre que prefieren mantener en el anónimato.
Al parecer, y según lo que menciónó la estrella de telerrealidad a E! News, habían conversado con ella la posibilidad de tener otro bebé, pero que si llegaba a pasar, se podría ver en la temporada 16 de Keeping Up with The Kardashians.
Aunque desde hace un tiempo medios locales le preguntaban a Kim sobre la posibilidad de ampliar la familia, ella no se mostraba muy convencida. Incluso, hace un par de meses en una entrevista con la edición americana ELLE, comentó que su hogar y corazón se sentían realmente llenos en ese momento y que en el caso de tener otro hijo, sería el último. "No creo que pueda manejar más que eso...No tengo tiempo para más", reflexionó la celebridad.