Aunque lleva cerca de 15 años de carrera, Chris Pratt recién ahora está viviendo su etapa más sobreexpuesta y exitosa y por estos días brilla como el flamante protagonista de Jurassic World, a estrenarse este jueves 11 de junio en Chile. Esto lo logró de la mano de un fuerte cambio de imagen -llegó a pesar más de 130 kilos- que lo llevó a conseguir personajes protagónicos en filmes como Guardianes de la Galaxia.
"Era impotente, estaba fatigado y emocionalmente deprimido. Tenía serios problemas de salud que de verdad me estaban afectando", aseguró el estadounidense sobre su época más oscura en una reciente entrevista.
Sus inicios
De 35 años de edad, Pratt empezó su carrera en 2000 en el filme de terror “Cursed 3”, la cual le permitió ingresar a la industria y ser elegido para participar en la serie “Everwood”, donde fue parte del elenco principal.
Posteriormente, al término de esta producción, se sumó en su cuarta temporada a la serie adolescente “The O.C.”, donde interpretó a un activista por nueve episodios.
En 2008 llegó la oportunidad de participar en una cinta más importante: “Se busca”, estelarizada por Angelina Jolie y James McAvoy, donde tuvo un rol secundario y más relacionado con la comedia, género al que ha estado ligado prácticamente toda su carrera.
Luego de esta película vinieron “Guerra de Bodas”, “Jennifer’s Body” y “Take me home tonight”. Fue en la grabación de esta última producción cuando conoció a su esposa, la actriz Anna Faris, conocida por protagonizar la saga “Scary Movie” y con quien tiene un hijo, Jack. Antes de eso, se le vinculó con la protagonista de Revenge: Emily Van Camp.
Aunque buscó protagonizar cintas de mayor relevancia en la industria de Hollywood como “Star Trek”, donde perdió el rol de James T. Kirk ante Chris Pine, siempre se le encasillaba en un rol más bien secundario y vinculado con el humor. Por lo mismo, en 2009 fue escogido para sumarse a la comedia televisiva “Parks and Recreation”, donde interpreta a Andy, uno de los personajes más destacados de la serie y el cual le dio mayor visibilidad.
Ya en 2011 tuvo su primer desafío en un personaje alejado al que ya estaba acostumbrado: Fue en la película “Moneyball”, donde interpretó a Scott Hatteberg. En esa ocasión, además de cambiar el estilo de su actuación, modificó su imagen, perdiendo al menos 13 kilos para el rol.
El auge
Sin embargo, en febrero de 2013 vino el mayor cambio de su carrera: Fue seleccionado para protagonizar “Guardianes de la Galaxia”, la película de superhéroes de Marvel en la que interpreta a Peter Quill, también conocido como Star-Lord. Esto lo obligó a modificar mucho más su cuerpo para conseguir una imagen digna de personaje de cómic, por lo que tuvo que bajar más de 30 kilos.
Tras lograr ese rol, su carrera ha ido en ascenso: Ahora es el protagonista de “Jurassic World”, cuarta cinta de la saga de dinosaurios que se podrá ver este jueves en cines locales.
También estelarizará la segunda parte de “Guardianes de la Galaxia”, prevista para 2017.
Por lo mismo, Chris Pratt ya es considerado como una de las “estrellas” a tener en cuenta los próximos años en Hollywood. Sin embargo, él sigue mostrándose igual de amigable y alejado de los aires de divo que marcan a gran parte de los miembros de este mundo.
Al parecer, Pratt ya tiene claro que no hay vuelta atrás en lo que respecta al cambio físico y de roles al que ha optado últimamente. “Lo que quiero es no tener un trabajo diferente. Quiero que este sea mi trabajo por siempre”, aseguró en una entrevista pasada con ABC.
