Alanis Morissette fue víctima de su ex mánager, Jonathan Todd Schwartz, quien admitió haberle robado 4,8 millones de dólares entre mayo de 2010 y enero de 2014.
De acuerdo a lo que informó Los Angeles Times, Schwartz presentó una serie de documentos legales en los que confesó ser culpable de fraude electrónico y evasión fiscal. Además, reconoció que sustrajo 1,7 millones de dólares pertenecientes a deportistas y otras celebridades, cuya identidad se desconoce por el momento.
Durante su trabajo en la firma GSO Business Management, el ex mánager de la cantante se quedó con dinero extra de ésta a través de diferentes métodos, como la falsificación de la firma de su clienta, por ejemplo.
Es más, en una ocasión fue cuestionado por ciertos fondos perdidos, pero él trató de encubrir todo esto asegurando que los había invertido, junto a otros empleados de la compañía GSO, en un negocio ilegal de marihuana
“Fue contratado para proteger el dinero de sus clientes administrándolo profesionalmente, pero en su lugar se apropió indebidamente de millones para enriquecerse”, dijo en un comunicado Deirdre Fike, subdirectora a cargo de la oficina del FBI en Los Angeles.
El acusado comparecerá el 1 de febrero para escuchar la condena en su contra. Tras el acuerdo de culpabilidad con la Fiscalía, se espera que sea condenado a entre cuatro y seis años de prisión y a pagar 8,2 millones de dólares como indemnización.
Morissette, que introdujo la demanda en mayo pasado, señaló que su ex mánager le costó en total 15 millones de dólares, entre el robo y otros malos manejos financieros.
La cantante canadiense y nacionalizada estadounidense indicó, además, que rechazó una lucrativa oferta para hacer cinco conciertos en Las Vegas después de que Schwartz la convenciera que no necesitaba el dinero. Ella lo despidió en marzo cuando no pudo explicarle y justificarle sus finanzas.