Hace menos de dos semanas que Mariah Carey y el magnate australiano James Packer terminaron su relación amorosa, pero empiezan a conocerse detalles de cómo habría sido su vida de casados.
Según un documento publicado por TMZ, la pareja tenía dispuesto un contrato prenupcial con increíbles cláusulas que se traducían en compra de ropa, especificación de cuáles eran o no los regalos y el uso del avión privado del multimillonario oceánico.
"Exceptuando los regalos por el compromiso, la boda o por cumpleaños y aniversarios, ninguna pieza de joyería o de lujo que cueste más de 250.000 dólares (unos 225.000 euros) será considerada un obsequio a menos que esté acompañada de una tarjeta que detalle específicamente por escrito: 'Este es mi regalo para ti'", se puede leer en uno de los puntos.
Asimismo, sería decisión de la estrella pop quedarse o no con el anillo de compromiso —avaluado en US$ 10 millones— que le regaló Packer al pedirle matrimonio, después de siete meses de relación sentimental.
Continuando con los absurdos, el australiano aceptaba comprarle la ropa a su prometida. Aunque no especificaba el valor monetario, sí apuntaba a que el vestuario no sería usado para sus presentaciones en vivo ni eventos ni la ropa de sus hijos.
En el uso del jet privado, por ejemplo, James Packer tendría la última palabra, de acuerdo a las necesidades de Carey.
Por último, la mujer de "Without you" recibiría US$ 6 millones por año completado de matrimonio, en caso de un futuro divorcio.
Toda esta situación, según las mismas fuentes de TMZ, causaron la separación. Esto, debido a que Carey catalogó el acuerdo prenupcial como "insultante y de mal gusto".
