No existen dudas de que uno de las películas más populares del género de terror durante la primera década del siglo XXI es "The Ring" o "El Aro" en español, estrenada en 2002.
La cinta que tiene como protagonista a Samara, una niña que murió encerrada en un pozo y que aparece en un video, saliendo del televisor para asesinar a quien la vea, generó pavor en todo el mundo.
Sin embargo, a diferencia de lo que se podría creer, esta cinta no es completa ficción ya que está basada en una historia que es muy popular en el país del sol naciente.
Primero que todo hay que aclarar que la cinta "The Ring" es un remake de la película japonesa "Ringu", que a su vez se basa en una novela del escritor Koji Suzuki.
La historia se basa en Samara, una niña con dotes sobrenaturales que fue arrojada a un pozo y regresa desde la muerte a través de un video maldito. Si alquien ve la cinta, en siete días Samara saldrá del pozo para transportarse al mundo físico y asesinarlo.
Este argumento se basa en una leyenda que habría ocurrido al interior del castillo Himeji, el que además es Patrimonio de la Humanidad de la Unesco.
Según indica un artículo del diario La Vanguardia de México, en la edificación, que fue construida entre 1333 y 1346, vivía Okiku, una sirviente del samurai Tessa Aoyama. Dice la leyenda que este último estaba perdidamente enamorado de Okiku y que le dijo que dejaría a su esposa si escapaba con él pero que ella no quiso.
Ante esto, Aoyama escondió uno de los diez platos dorados que la mujer tenía como obligación cuidar con la intención de chantajearla para que se fuera con él o sino la acusaría de robo, lo que le significaría tortura y muerte. Posteriormente, Okiky murió al caer a un pozo, aunque la leyenda no precisó si el samurai la mató y arrojó o ella se lanzó al verse sin ninguna otra opción.
La historia cuenta que Okiku, ya muerta, salía del pozo y se le aparecía para el samurai para atormentarlo, quien se volvía loco al verla conta además los platos dorados y volverse violenta con él al ver que faltaba uno. Algo muy similar a lo que hace Samara en la película que tuvo dos versiones que continuan la historia: "El Aro " (2005) y "El Aro 3" (2017).
Lo curioso de la historia es que el pozo sí existe aunque se encuentra clausurado con barras de metal.
