Abraham "Avi" Loeb, es un experto de la Universidad de Harvard que plantea que nuestro universo habría sido creado por una especie de laboratorio.
A lo largo de esta última década, el físico teórico especializado en estudios de astrofísica y cosmología ha divulgado decenas de papers que tratan de explicar cómo se originó el cosmos, desafiando la teoría del Big Bang que fundamenta que "el universo comenzó en un solo punto, a partir de un grupo de diminutas partículas calientes mezcladas con luz y energía", las cuales al comenzar a expandirse se convirtieron en las primeras estrellas y galaxias, según detalla un artículo de National Geographic.
El Universo: Un posible proyecto químico creado por alguien
Como explica Loeb en un artículo científico publicado en la revista Scientific American viralizado en redes sociales y medios especializados por estos días, el espacio podría ser un “universo bebé” creado por una civilización de avanzada tecnología en una especie laboratorio.
“Una posibilidad menos explorada es que nuestro universo fue creado en el laboratorio de una civilización tecnológicamente avanzada. Dado que nuestro universo tiene una geometría plana con una energía neta cero, una civilización avanzada podría haber desarrollado una tecnología que creó un universo bebé de la nada mediante el efecto túnel cuántico”, comienza detallando el escrito titulado “¿Nuestro universo fue creado en un laboratorio?”.
Añade: “Esta posible historia de origen unifica la noción religiosa de un creador con la noción secular de la gravedad cuántica. No poseemos una teoría predictiva que combine los dos pilares de la física moderna: la mecánica cuántica y la gravedad”.
No obstante, concluye: “Una civilización más avanzada podría haber logrado esta hazaña y dominar la tecnología de creación de universos bebé. Si eso sucediera, entonces no solo podría explicar el origen de nuestro universo, sino que también sugeriría que un universo como el nuestro, que en esta imagen alberga una civilización tecnológicamente avanzada que da a luz a un nuevo universo plano, es como un sistema biológico que mantiene la longevidad de su material genético a través de múltiples generaciones”.
A sus 24 años, el profesor Loeb se doctoró en física en la Universidad Hebrea de Jerusalén (1986). Según detalla el sitio web oficial de la Universidad de Harvard pronto se convirtió en miembro del Instituto de Estudios Avanzados de Princeton entre 1988 y 1993.
Este último año (1993) se trasladó a la Universidad de Harvard transformándose en docente titular. En la actualidad es profesor de Ciencias Frank B. Baird Jr. y exdirector de dicho departamento.