Ya no tienes que gastarte millones de dólares para comprar una obra de arte original.
No son sólo las obras de artistas de renombre son las que más venden. Cada vez hay más ferias de arte y galerías online, lo que significa que los nuevos artistas son capaces de llegar a los compradores más allá de sus países de origen.
"Es la locura en estos momentos", le dice Alex Rotter, director de arte contemporáneo y de posguerra de la casa de subastas Christie´s, a Katie Hope de BBC News.
Más acceso
Las ventas globales de arte y antigüedades alcanzaron los US$57.000 millones el año pasado, un 11% menos que en 2015, dominado por Estados Unidos y seguido por el Reino Unido y China.
Lo que ha crecido bastante es el mercado de las ventas online y las ferias que vuelven más asequibles las obras.
Una de ellas, la Affordable Art Fair (Feria del Arte Asequible), ha crecido por las nubes. Empezó en 1999, en el parque de Battersea, Londres y ahora organiza ferias en 10 ciudades en todo el mundo.
Su fundador, Will Ramsay, dice que su motivación fue demostrar que "no tienes que ser multimillonario para comprar arte".
Aunque los precios de las obras a la venta pueden alcanzar los US$6.500, la media es US$780.
Su empresa gana dinero alquilando espacio en sus ferias a las galerías de arte, además de los ingresos por venta de boletos y patrocinadores.
Hace poco empezaron a vender a través de Internet, un área que complementa a las ferias de arte, según Ramsay.
Nuevas miras
Cuando el artista británico, Paul West, hizo su primera venta a través de la galería online Artfinder a un comprador australiano, saltó de alegría. Hasta que se dio cuenta que tenía que enviar la obra a su nuevo dueño de forma segura.
En los tres años que lleva en este portal, West ha vendido 47 cuadros, un tercio de los cuales fueron a compradores estadounidenses y australianos.
Para el artista de 52 años, poder vender fuera del Reino Unido ha ampliado sus oportunidades.
"Acceder al mercado global es maravilloso. Estaba produciendo trabajos de los cuales me sentía orgulloso, pero aparte de ferias de arte, era difícil que fuesen vistos".
Oportunidades
El fundador y director de Artfinder, Jonas Almgren, estableció este portal online en 2013. Quería dar a artistas independientes como West, quienes no estaban representados por una galería, la oportunidad de vender sus obras.
El portal ya cuenta con artistas de 108 países y con clientes en todas partes.
Después de trabajar como informático en Silicon Valley, Almgren pasó una década trabajando en galerías exclusivas neoyorquinas donde pagar US$10.000 por un cuadro se considera razonable.
Dice que su experiencia le ha enseñado que la mayoría de los artistas "simplemente no tienen la oportunidad" de tener éxito, y quería cambiar esto.
Su empresa cobra un 30% de comisión sobre las ventas, y ofrece devoluciones sin cargos, ya que reconoce que es difícil comprar algo tan visual por internet.
El año pasado lograron vender US$5 millones en cuadros.
Esto le ha enseñado cómo los gustos varían dependiendo del país.
Según le explica Almgren a Katie Hope de BBC News, mientras las pinturas abstractas y paisajísticas son populares en todas partes, a los británicos les gustan especialmente las pinturas de gatos y perros. A los estadounidenses, por otro lado, les gustan los retratos y normalmente compran cuadros grandes, seguramente porque tienen casas más amplias.
Además, la actual debilidad de la libra esterlina ha significado que los compradores de EE.UU. pueden gastar más dinero en obras británicas.
Pero lo más importante, según Almgren, es que su galería online intenta satisfacer todos los gustos.
Rise Art también quiso revolucionar el mercado de arte. Establecido en 2011, esta empresa se centra en ventas online, con precios que oscilan entre US$260 y US$39.000.
A pesar de que las ventas de arte online representan únicamente el 10% del mercado global, hay estudios que señalan que esto podría cambiar.
Pero el fundador y director de Rise Art, Scott Phillips, admite que, por muy buenas que sean las imágenes virtuales, nada sustituye ver una obra en persona. Para ayudar a sus compradores, el portal les ofrece la posibilidad de alquilar obras de arte y convivir con ellas antes de comprarlas.
Su empresa es más selectiva que Artfinder y sólo acepta entre el 1% y 5% de los artistas que solicitan vender a través de ellos. Rise Art también cobra una comisión mayor: 40%.
Creatividad
Phillips afirma que portales como el suyo forman parte de una nueva ola que está transformando el mercado.
Dice que empresas como eBay y Amazon tienen productos que son más bien mercancías y que han sido "destructivos de cierta manera". Rise Art, en cambio, "celebra la creatividad, ofreciendo a los artistas una nueva manera de vender y mostrar su trabajo", según le comenta a Katie Hope de BBC News.
Su empresa exporta obras a 40 países y sus ingresos durante los primeros tres meses de este año fueron un 110% superiores a los del anterior.
Pero las casas tradicionales siguen vigentes, aunque se han adaptado. Es el caso de Christie's, donde una de sus últimas colecciones, que incluye 26 obras de arte contemporáneo, estuvieron en un "mini tour" por el mundo, pasando por Hong Kong, Londres y Los Ángeles.
La subasta incluye obras famosas de Christopher Wool y Sigmar Polke valoradas en US$20 millones cada una. Se espera que las 26 obras lleguen a los US$100 millones.
Alex Rotter, de Christie's explica que además de exponerlas en sus oficinas de Nueva York, donde se realizará la subasta, era importante mostrarlas alrededor del mundo, para alimentar el interés internacional.
"Si vas a pagar miles de dólares por una obra, quieres ser el primero en verla", añade.