El Presidente de los Estados Unidos, Donald Trump realizó este miércoles una visita sorpresa a las tropas del país norteamericano que permanecen en Irak.
El Mandatario había generado especulaciones debido a que no había tuiteado durante 17 horas y la oficina de prensa de la Casa Blanca se encontraba vacía y con las luces apagadas. Finalmente, se confirmó que el presidente estadounidense había aterrizado junto a su esposa Melania en la base aérea Al Asad, siendo su primera visita como Jefe de Estado a las tropas que permanecen en el Medio Oriente.
En la ocasión, Trump saludó y se fotografió con los soldados y profirió una crítica al rol que el país que preside ha tenido en el último tiempo en los conflictos bélicos, asegunnado que "Estados Unidos no puede seguir siendo el policía del mundo".
"Es injusto cuando solo nosotros asumimos la carga", recalcó además la máxima autoridad estadounidense.
Con esta visita se mantiene la tradición de los Presidentes de los Estados Unidos de viajar a Irak desde que inició la ocupación estadounidense en ese país. El primero en hacerlo fue George W. Bush en 2003, cuando visitó a soldados heridos en Walter Reed.
