El ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, se refirió a la situación con constructoras del país que actualmente se encuentran en un complejo escenario económico.
En este escenario, la semana pasada la constructora Claro, Vicuña, Valenzuela solictó la quiebra y su equipo legal apuntó directamente al MOP por la situación.
"Hoy la compañía debe avanzar hacia su liquidación afectada por los cambios estructurales que enfrenta la industria de la construcción y la burocracia de los mandantes públicos, en especial del Ministerio de Obras Públicas, para gestionar pagos, fracasando los intentos de solución extrajudiciales", señalaron desde la empresa.
Al respecto, en conversación con Tele13 Radio, García explicó que "los sistemas públicos son lentos, porque hay que resguardar el pago".
En esta misma línea, detalló que estos "montos bien significativos, tienen que pasar por Contraloría, tiene que ser completamente transparente, y en un sistema normal, en tiempo normal, eso las empresas lo tienen internalizado en los costos. Pero cuando vienen problemas de liquidez en las empresas, por decisiones que tienen con los contratos públicos, pero también porque han sido muy impactados por decisiones privadas que han tomado, decisiones de compras de suelo de proyectos inmobiliarios que no se han llevado a cabo, alzas de otro tipo, problemas con la banca, y empieza a ser un efecto dominó".
"Las constructoras se quejan porque es algo que habitualmente pasa en el Estado en que nos demoramos en pagar porque hay que resguardar esos pagos, que son las garantías finales, cuando el contrato está terminado", añadió.
Del mismo modo, García descartó que haya mayores retrasos que antes: "Estamos activando los pagos mucho mejor que antes, es un trabajo que tenemos muy estrecho con la Cámara Chilena de la Construcción (CChC) desde el mes de marzo".
"En el mes de abril mandaté para que pudiéramos activar un nuevo sistema para los contratos nuevos, algo que existía solamente para muy pocos contratos que tenía el Ministerio de Obras Públicas (MOP), ahora para casi el 90% de los contratos. ¿Qué significa esto? que ahora los contratos van a tener un sistema de reajuste continuo, lo que significa que compartimos los riesgos entre el Estado y el sector privado si suben los materiales, se les paga más, y si bajan, se les paga menos", agregó García.
También se le consultó por las críticas del mundo privado a la antigüedad de los reglamentos. Sobre este punto, aseguró que "eso lo comparto plenamente, es un problema estructural, pero que justamente estas crisis, si tienen algo positivo, porque pucha que tienen cosas negativas, han sido bien difíciles, y sin minimizar lo negativo, estas crisis nos permiten alinearnos para dar saltos cualitativos importantes para modernizar el Estado y modernizar el sector privado".