Contexto. Ante las perspectivas de mejoría de la economía que se han ido ratificando con las últimas estadísticas económicas, el Consejo Fiscal Autónomo (CFA) en su “Informe de evaluación y monitoreo del cálculo de Balance Estructural y nivel prudente de deuda” subraya la importancia de que el gobierno y el Congreso actúen con cautela respecto a las mejores perspectivas económicas para 2024″.

  • El CFA confirma que la Dirección de Presupuestos (Dipres) ha aplicado correctamente la metodología para calcular el Balance Estructural (BE) para 2023‐2028. Además, analizó las proyecciones de la Dipres y destacó los efectos positivos de las mejoras en las perspectivas de crecimiento económico y el precio del cobre en los ingresos fiscales efectivos.
  • El CFA ha advertido en varias ocasiones que en los últimos años se ha producido un deterioro de las finanzas públicas que no permite generar nuevos gastos públicos.

El problema: A pesar de estas mejoras que se prevén para la economía, el CFA enfatiza que ellas no necesariamente generan ingresos fiscales estructurales. Por lo que no se reduce el estrés fiscal ni se ampliarían mayores espacios para gasto público.

  • Las proyecciones de ingresos fiscales para 2025-2028 muestran un incremento promedio de 2.0% anual, pero las proyecciones de gasto compatible con la meta de Balance Estructural sólo mejoran un 0.5% anual.
  • Las holguras fiscales, la diferencia entre el gasto compatible y los gastos comprometidos, se mantienen estrechas, aumentando solo 0,1 puntos porcentuales del PIB en promedio anual.
  • Las nuevas estimaciones de expertos para las variables de PIB no minero tendencial y precio de largo plazo del cobre, programadas para julio, serán cruciales para determinar los ingresos estructurales.

El déficit estructural. La Dipres proyecta un déficit estructural de 2,2% del PIB para 2024, superior a su meta de 1,9%. El CFA recomienda que la Dipres presente los avances en los ajustes de gastos en su próximo informe para cumplir con el compromiso de déficit estructural.

  • Para estabilizar la deuda bruta por debajo del 45% del PIB hacia 2028, se requiere el estricto cumplimiento de las metas de Balance Estructural hasta 2026 y que este sea de un 0% del PIB desde 2027. El CFA sugiere reestimar el Balance Estructural necesario para lograr esto.

Insistencia con el litio. El informe destaca la falta de mecanismos adecuados para ahorrar ingresos fiscales extraordinarios, como los obtenidos del boom del litio en 2022-2023. El CFA ve una oportunidad de aprendizaje para que la institucionalidad fiscal reaccione oportunamente ante auges de ingresos fiscales.

Recomendación. El CFA reitera la necesidad de un consenso político amplio para mejorar permanentemente la situación fiscal, implicando tanto al Poder Ejecutivo como al Legislativo. Esto debería traducirse en una agenda concreta para aumentar los ingresos fiscales disponibles, ajustar la trayectoria de gastos y reconstruir los colchones fiscales.

  • Sin mejoras en las proyecciones de largo plazo del PIB y el precio del cobre, o sin nuevas fuentes de financiamiento permanente, según la regla fiscal dual, no habrá mayores espacios para el gasto fiscal, manteniendo el estrés fiscal en el período 2025-2028.

 

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