Una encuesta realizada por la Facultad de Derecho de la Universidad Andrés Bello, en conjunto con la empresa de medición GfK Adimark que evaluó el sistema procesal penal y el efecto de la reforma Procesal Penal, concluyó que el 69% de los consultados lo calificó con nota “roja”, o sea de 1 a 4; el 22% situó el funcionamiento entre 4 y 5, y la mejor calificación, entre 6 y 7, sólo llegó al 9%.
De acuerdo a lo informado por La Tercera, ello sería una de las consecuencias que hay de la desconfianza generalizada que hay hacia los distintos poderes del Estado, además de que las personas perciben una cierta impunidad de los delincuentes que cometen robos, al no obtener condenas en su contra.
La encuesta reveló además que el 54% de los entrevistados cree que durante los últimos cinco años el sistema judicial ha mejorado ya que ahora es más abierto a la gente gracias al rol de los medios de comunicación. Aquellos que opinaron que el sistema ha empeorado, argumentan sobre todo el problema de la “puerta giratoria”.
Por ahora, los senadores Alberto Espina y Felipe Harboe trabajan en la redacción de un proyecto de ley que les impida a los jueces bajar el piso mínimo de pena que establece el Código Penal.