Por unanimidad la Sala del Senado aprobó el proyecto que regula la elección democrática de los Gobernadores Regionales (hoy intendentes). Con esto, la iniciativa será despachada del Congreso y quedará en condiciones para su promulgación y posterior debut en 2020.
Esto luego que los parlamentarios aprobaran el informe de la Comisión Mixta que resolvió las divergencias suscitadas durante la tramitación del proyecto. En concreto, la duración del cargo de los Consejeros Regionales electos este año, considerando que la idea es que ambos comicios coincidan.
Respecto de este punto, los parlamentarios resolvieron que en 2021 se ajustará la elección de consejeros regionales (cores) a un periodo de tres años, para posteriormente realizar el conjunto de los comicios locales -incluyendo alcaldes y concejales- en 2024.
El Senado consigna que si bien la fórmula no dejó conforme a todos los parlamentarios -quienes acusaron deficiencias en la forma de hacer calzar ambos comicios- primó la idea de aprobar el texto como "un paso importante" hacia la descentralización y la elección popular de las autoridades regionales.
El ministro de la Segpres, Gabriel de la Fuente, destacó que es un paso histórico para la institucionalidad democrática de Chile y un paso que nuevamente da la Presidenta de la República en la agenda descentralizadora que ella propuso al país”.
“En el año 2020 tendremos elección de gobernadores regionales por primera vez en Chile. La ciudadanía regional se va a poder pronunciar sobre quién quiere que dirija los destinos de su región”, explicó el secretario de Estado.
Por su parte, la portavoz del Ejecutivo, Paula Narváez, remarcó que el proyecto "es una puerta hacia la descentralización con la que como gobierno nos hemos comprometido".
Los ejes del proyecto
La iniciativa establece que la figura del gobernador regional reemplazará a la autoridad que hoy conocemos como intendente. Además, tendrá la función de presidir el Consejo Regional y su elección se realizará conjuntamente con la de alcaldes y concejales en 2020.
Según establece el proyecto, será electo gobernador regional el candidato que obtenga la mayor cantidad de votos válidamente emitidos, siempre que consiga al menos el 40% de los sufragios. Si ningún postulante alcanza esa cifra, se realizará una segunda votación, el cuarto domingo siguiente a la fecha de los comicios, entre los dos candidatos que hayan obtenido las más altas mayorías.
Además, se incorpora la figura de delegados presidenciales regionales y delegados presidenciales provinciales, quienes representarán Gobierno de turno en la región.
En el proyecto se fijaron incompatibilidades con la postulación a cargos como el de Presidente de la República, parlamentario, consejero regional, alcalde y concejal.
En caso de que alguna autoridad como ministros, subsecretarios y delegados presidenciales provinciales, busquen convertirse en gobernadores, deberán renunciar a su función dentro del año inmediatamente anterior a la elección.
