Fuerte críticas por "homofobia" hicieron diputados y diputadas oficialistas contra la integrante del Observatorio Legislativo Cristiano Marcela Aranda, quien fue invitada a exponer en la comisión que analiza la acusación constitucional contra el ministro de Educación, Marco Antonio Ávila. 

Los parlamentarios aseguraron que la intervención de la activista que se hizo conocida por promover “El Bus de la Libertad” contra la identidad de género, confirma que el libelo contra Ávila está inspirado en la homofobia, como había dicho también la vocera de Gobierno, Camila Vallejo. 

“Marcela Aranda confirma que acusación constitucional contra ministro Ávila responde a que su ‘activismo LGBTIQ+ y su condición (sic) ha superado el límite de lo privado”, escribió la diputada de Comunes Camila Rojas. 

“¿Se necesitan más pruebas para evidenciar que esto se trata de una persecución homofóbica?”, preguntó. 

Lo mismo opinó la diputada de Convergencia Social Emilia Schneider: “Marcela Aranda, del Observatorio Legislativo Cristiano, promotora del bus del odio y que discrimina a su propia hija, confirma en la cámara que hay homofobia detrás de la acusación constitucional al ministro Ávila. A esta gente lleva la derecha para apoyar sus argumentos, fatal”, escribió en su cuenta de Twitter. 

En la comisión específica, a la que Aranda asistió invitada por el diputado de Renovación Nacional Miguel Ángel Becker, la activista calificó a Ávila como un lobbista del colectivo LGBTIQ+.

“El ministro es un lobbista LGBTIQ+ y/o un ministro de Educación de la República de Chile (...) el ministro debe dar explicaciones si es que su condición, cualquiera sea, impide o afecta de alguna manera la ejecución de su cargo y vulnera los derechos de otros, o incumple las leyes o la Constitución”, aseguró. 

“No es algo directamente que tiene que ver con el cuestionamiento de su orientación. Lo que yo quiero decir, y tenemos los documentos para probarlo, es que él hoy y su activismo LGBTIQ+, y su condición, ha superado el límite de lo privado, y él ha cruzado el límite de vulnerar el derecho de los padres, de los niños, de la comunidad educativa, tomando esa posición para ejercer ese activismo”, añadió. 

Quienes apoyan esta acusación la hicieron bajo el argumento que el ministro Ávila impulsaría una “ideología de género” en las aulas y privaría a los padres del “derecho preferente de los padres a educar a sus hijos”.

Esto se dio luego de la polémica por la distribución de una guía para la sexualidad afectiva que distribuyó el Ministerio de Educación en distintos recintos municipales, que data del año 2017 y al que se le hizo una actualización en mayo de 2023. Aquel documento entrega sugerencias sobre el trato hacia personas pertenecientes a las diversidades sexuales.

 

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