Aprobando la extensión de la objeción de conciencia al equipo médico, la comisión de Constitución del Senado despachó el proyecto que despenaliza el aborto en tres causales, el que deberá ser analizado ahora por la comisión de Hacienda de la Cámara Alta.
El despacho de la iniciativa tuvo varias instancias de análisis y discusión de las tres causales, acordando entre otras cosas la modificación de la redacción para buscar acuerdo sobre la constatación de hechos y la certificación de violación, lo que fue despejado durante el día de hoy.
Sin embargo, lo que suscitó mayor debate fue la objeción de conciencia. Al respecto, el senador Felipe Harboe indicó que "el proyecto pondera el derecho a determinación de conciencia del médico y la integridad de la mujer", pero agregó que "si bien creo reconocer solo la objeción del médico, si la expansión al equipo médico garantiza la aprobación del proyecto concurriré con mi voto favorable".
Por su parte, el senador Alberto Espina, solicitó ampliar "a todo el cuerpo médico", la objeción de conciencia, recalcando que "no se puede imponer a las instituciones privadas de salud una obligación que escape a los fines, objetivos y valores en lo que se formó".
El senador Pedro Araya, señaló que "este es uno de los temas centrales, porque también están en juego otros derechos tan importantes como los de la mujer. El proyecto que presenta el Ejecutivo solo dice que ésta objeción de conciencia solo la puede tener el médico, pero no se puede olvidar que estamos ante la comisión de un delito que no tiene sanción penal en tres causales, por lo que debe alcanzar a todo el personal que se encuentra en pabellón".
En tanto, el senador Hernán Larraín, manifestó que "este tema atraviesa el eje central del debate. El hecho de que el Ejecutivo haya incluido objeción de conciencia, dice que estamos en una materia muy delicada que se debe resolver bien. Y así tal como está en el texto no lo hace, porque solo la reglamenta desde el procedimiento en que solo el médico puede plantearla y solo bajo ciertas hipótesis determinadas".
Finalmente, el senador Alfonso De Urresti, argumentó que "espero que exista la igualdad en el acceso y que no se utilice la objeción de conciencia en los lugares más alejados y con menos médicos, para justificar no aplicar la ley. El principio de la negación del servicio no es correcto que quede consagrado en la ley, porque se estará en situación desmejorada en aquellos lugares rurales más alejados".