Tras caer ayer a su nivel más bajo en cinco meses, el dólar en Chile despierta con una tendencia alcista, pendiente de la invasión militar a gran escala de Rusia a Ucrania.
El tipo de cambio ya sube $ 8,22 hacia los $ 799,05, según Bloomberg. Este es el salto más grande desde el 4 de febrero.
"Con esta mayor escalada en los conflictos entre Rusia y Ucrania, los activos considerados de mayor riesgo y ligados al ciclo económico muestran una fuerte debilidad, donde las monedas emergentes han sufrido el impacto de los ataques, apoyando alzas del dólar frente a estas divisas", explica el jefe de estudios trading de Capitaria, Ricardo Bustamante.
"Si continuamos viendo ataques de Rusia en Ucrania y otras potencias se involucran de manera bélica, el dólar podría seguir escalando en su cotización, ya que además suele considerarse como refugio, especialmente cuando el escenario negativo no es en Estados Unidos", agrega.
De este modo, la divisa se acopla a los movimientos del dollar index -que mide el valor de la divisa en relación a una canasta de monedas extranjeras- el cual avanza casi 1% hasta los 97,057 puntos.
En cambio, el tipo de cambio local ignora al cobre, cuyos contratos futuros registran un crecimiento de 2,14% hacia los US$ 4,58 la libra.
Asi, el peso chileno se posiciona en el noveno lugar entre las monedas emergentes con peor desempeño diario, mientras que a nivel anual mantiene el tercer puesto entre las mejores.
Golpe a las monedas europeas
Hasta ahora, el peso chileno no ha sido el único perjudicado. El rublo ruso ya se ubica como la quinta moneda con peor desempeño entre las emergentes esta jornada, al subir 3% a un histórico 83,65 por dólar.
En tanto, el euro cae 1,2% a los 1,1157, el nivel más bajo desde el 27 de enero.
Por su parte, el franco suizo -una moneda que los inversionistas compran cuando hay altos niveles de incertidumbre- se disparó durante la madrugada a su nivel más alto desde 2015 frente al euro en 1,0292.
El analista de MUFG, Lee Hardman, señaló a Reuters que el sentimiento de aversión al riesgo "dominaría en el corto plazo, favoreciendo una mayor fortaleza del dólar estadounidense, el yen y el franco suizo".
Por el contrario, agregó que "los riesgos siguen estando muy inclinados a la baja para el rublo y otras monedas europeas que son más sensibles a los efectos secundarios negativos de la acción militar en Ucrania".