El ministro de Hacienda, Mario Marcel, abordó esta mañana la sorpresiva y polémica remoción del exsubsecretario de Previsión Social, Christian Larraín, luego de que ayer se conociera que el Ejecutivo le pidió la renuncia luego de una supuesta acusación de acoso sexual. Larraín ha declarado desconocer los motivos que originaron su repentina destitución del cargo.
En conversación con Radio Concierto, el jefe de las finanzas públicas primero valoró el rol del ingeniero comercial durante la tramitación de la reforma previsional.
"Larraín fue clave en la arquitectura del proyecto que presentó el Gobierno e hizo un gran trabajo, liderando un equipo técnico, trabajando con los técnicos del Ministerio de Hacienda. Y ese fue su gran aporte", partió señalando el ministro, agregando que la exautoridad reconoció que el escenario político era complejo en el Congreso por el rechazo a la propuesta original del Gobierno.
"Lo que ocurrió después es que el proceso de discusión ha sido complejo porque hay una parte en que se buscan acuerdos y que no tiene líneas rojas, pero la contraparte no se sienta en la mesa. Hemos tenido numerosos episodios, y nos encontramos con que se trata de demorar la reforma previsional", enfatizó Marcel.
El ministro descartó tener antecedentes sobre las circunstancias en que ocurrió la remoción de Larraín: "Desconozco lo que ocurre al interior de otro ministerio, pero el gran problema es la ausencia de un interlocutor para llegar acuerdos", recalcó.
"El Gobierno siempre ha estado dispuesto a flexibilizar y no tiene líneas rojas en este proyecto, además de tener una propuesta sólida (...). No hay pugna entre duros y blandos, el tema es cómo se logra estructurar una conversación fructífera", cerró el secretario de Estado.