Este miércoles, el Banco Central acordó mantener la Tasa de Política Monetaria (TPM) en su nivel actual de 5,75%, en medio de una economía que muestra signos de desaceleración pero con una inflación que se aleja del objetivo del emisor por el incremento de las cuentas de la electricidad.
En una decisión que fue adoptada por la unanimidad de los consejeros, el banco mantuvo la tasa por primera vez desde junio del 2023, en aquella vez situándola en 11,25%. En los meses siguientes, inició un ciclo de recortes hasta la reducción de 25 puntos que adoptó en la cita del pasado 18 de junio.
La pausa es coherente con el mensaje que había entregado el emisor en el Informe de Política Monetaria (IPoM), cuando estimó que en el corto plazo la inflación repuntaría debido principalmente al efecto transitorio del aumento en las tarifas eléctricas.
Por lo tanto, los consejeros reiteraron que continuarán las bajas de tasa hacia adelante, aunque en menor magnitud.
"El Consejo estima que, de concretarse los supuestos del escenario central del IPoM de junio, la TPM habría acumulado durante el primer semestre el grueso de los recortes previstos para este año. La decisión de mantener en esta Reunión es congruente con la estrategia considerada en el escenario central de dicho Informe, el cual prevé que la TPM seguirá reduciéndose durante el horizonte de política monetaria, a un ritmo que tomará en cuenta la evolución del escenario macroeconómico y sus implicancias para la trayectoria de la inflación", señala el comunicado del banco.
Los argumentos
El instituto emisor detalló que la inflación de junio estuvo en línea con lo previsto en el último IPoM.
Esto, ya que la medida subyacente -IPC sin precios volátiles, como los alimentos y la energía- tuvo una variación menor a la esperada, principalmente en los bienes y por factores que se estiman "transitorios".
La variación anual del IPC -serie referencial empalmada- se ubicó en 3,8% y la de la medida subyacente en 3,2%, observaron los consejeros, agregando que las expectativas de inflación a dos años plazo, tanto la Encuesta de Expectativas Económicas (EEE) como la Encuesta de Operadores Financieros (EOF), se encuentran en torno a 3%.
En cuanto a la economía local, el Consejo reconoció que la actividad ha evolucionado "por debajo" de lo proyectado en el IPoM de junio, mientras que en la demanda los indicadores de alta frecuencia no sugieren grandes diferencias.
En mayo, recordó que el Imacec no minero disminuyó 0,5% mes a mes en su serie desestacionalizada (0,2% anual), resultado que se explicó en buena medida por factores puntuales de oferta.
"Los datos de actividad sectorial de junio (publicados hoy miércoles por el INE) mostraron un desempeño por debajo de lo previsto en algunos rubros. Hacia adelante, información proveniente de los catastros de grandes proyectos muestra un alza importante de los montos previstos para los próximos años", observaron los consejeros.
Junto con mencionar que la tasa de desempleo del trimestre móvil terminado en junio se mantuvo en 8,3%, agregaron que si bien continúan en terreno pesimista, las expectativas de las empresas y los hogares muestran "cierto aumento en lo reciente".
La visión sobre los mercados financieros
En su mirada sobre el escenario externo, los consejeros recalcaron que la inflación mundial, en general, ha continuado descendiendo a un "ritmo moderado", principalmente por una lenta reducción de los componentes de servicios.
"En Estados Unidos, el registro de inflación de junio estuvo por debajo de lo previsto y el mercado laboral ha dado señales de moderación en el margen, lo que ha vuelto algo menos restrictivas las perspectivas del mercado acerca de la política monetaria de la Reserva Federal", señalaron. De todos modos, continuaron, la actividad en esa economía tuvo un dinamismo "mayor al previsto" en el segundo trimestre.
"Esto contrasta con el ritmo de crecimiento acotado observado en el resto del mundo, en especial por una desaceleración mayor a la esperada en China. Las perspectivas de crecimiento a nivel global no muestran grandes cambios para este y el próximo año", agregaron.
Respecto de los mercados financieros globales, en comparación con lo observado en la reunión de junio, las tasas de interés de largo plazo se encuentran "algo más bajas", tanto en economías desarrolladas como en emergentes. Las bolsas han exhibido un desempeño mixto, con un dólar global que se apreció.
"Con vaivenes, tanto el precio del petróleo como el del cobre disminuyeron respecto de la reunión previa, este último impactado en parte por las señales algo más débiles de la economía china", señalaron los economistas.
En cuanto al mercado financiero local, las tasas de interés reajustables de corto y largo plazo han disminuido respecto de la última reunión, en un contexto de tasas nominales sin grandes variaciones.
El peso chileno se depreció frente al dólar, en línea con la disminución en el precio del cobre.
"El crédito sigue débil, especialmente su componente comercial. La Encuesta de Crédito Bancario del segundo trimestre de 2024 señala que las condiciones de oferta crediticia no han variado en lo reciente para la mayoría de las carteras, mientras que la demanda de crédito continúa baja en todos los segmentos. Las tasas de colocaciones a menores plazos siguen dando cuenta de un traspaso de los recortes de la TPM en línea con los patrones habituales", cerraron las autoridades monetarias.