La Superintendencia de Electricidad y Combustibles (SEC) clausuró este jueves una estación de servicio en Providencia, región Metropolitana, luego de comprobarse que estaban vendiendo combustible adulterado, el que no cumplía con los parámetros de calidad establecidos por la normativa vigente.
Según comunicó la SEC, la medida fue tomada luego de una investigación que permitió comprobar que la gasolina de 95 octanos expendida en esa estación, ubicada en Avenida Francisco Bilbao 548, presentaba un nivel de oxígeno superior al permitido, alcanzando un 17,27% m/m, cuando la normativa exige un máximo de 2% m/m. Este incumplimiento no sólo afecta la calidad del servicio y la seguridad de los usuarios, sino que también el rendimiento y la durabilidad de los vehículos, advirtió la autoridad.
La superintendenta de la SEC, Marta Cabeza, sostuvo que “esta clausura es resultado de la fiscalización permanente que desarrollamos a lo largo del país, para que la ciudadanía acceda a combustibles seguros y de calidad. Y si bien es cierto que las clausuras no son tan frecuentes, pues el nivel de cumplimiento es alto, llegando a un 98,5%, tomando más de 4 mil muestras, entre enero y septiembre de este año, de todos modos estamos siempre fiscalizando las diferentes estaciones de servicio, no solo ubicadas en las zonas urbanas sino también en sectores apartados del país”.
En este sentido, la superintendenta hizo un llamado a la ciudadanía a denunciar cuando tengan dudas con respecto a la calidad del combustible que están cargando o a otros aspectos relacionados con la seguridad y el servicio que entregan los encargados de las estaciones de servicio.