La ministra del Interior, Carolina Tohá, cuestionó el actuar de dos funcionarios de Carabineros que fueron detenidos por disparar al aire, en plena vía pública, en Cerrillos, durante la madrugada de este viernes, en el contexto de una reunión social en un domicilio particular.
La titular de Interior confirmó que ambos funcionarios fueron dados de baja por este hecho y pasarán a control de detención porque serán acusados, uno por disparos injustificados, y el otro por encubrimiento.
“Ambos funcionarios han sido dados de baja, pasarán a control de detención. No corresponde en lo más mínimo hacer disparos de ningún tipo para un civil, y particularmente para un policía, y menos en ese estado en que se encontraban las personas”, dijo la ministra Tohá.
Carabineros detenidos por disparos injustificados
Los hechos ocurrieron la madrugada de este viernes cuando vecinos de Cerrillos denunciaron a Carabineros que dos sujetos estaban realizando disparos al aire en plena vía pública.
El hecho se produjo a sólo algunas cuadras de la Subcomisaría de Cerrillos, por lo que personal policial llegó al lugar rápidamente y logró detener a quien estaba realizando disparos, pese a que se intentó dar a la fuga.
“Estaban en un edificio en las cercanías de la unidad policial, y al percatarse de la presencia policial en el edificio, baja hacia el estacionamiento y se da a la fuga por la puerta del ingreso de vehículos del lugar, lo que es percibido por personal de Asuntos Internos, iniciándose una persecución”, explicó el coronel Gonzalo Urbina de Carabineros.
"El fiscal de turno determina una orden de ingreso y registro del departamento donde estos funcionarios habrían estado compartiendo, logrando la ubicación del segundo carabinero, al cual también se le incauta un arma de fuego, que está siendo periciada por personal de Labocar para determinar si fue utilizada", añadió.
El segundo funcionario prestó declaración en calidad de testigo del hecho, pero posteriormente fue detenido como encubridor por, en su funcionario de carabinero, no denunciar el delito que estaba cometiendo su compañero.