El 1 de agosto de este 2022 comienza la implementación de la Ley de Subsidio y Prorrateo de deudas en servicios básicos, que le permitirá a miles de familias parcializar el pago de las cuentas de luz y agua que estaban pendientes y que fueron generadas durante los primeros meses de la pandemia de COVID-19.
La ley que fue aprobada con amplio apoyo en el Congreso tiene por objetivo que las familias más vulnerables puedan enfrentar sus deudas generadas entre el 18 de marzo de 2020 y el 31 de diciembre de 2021, considerado el período más difícil de la pandemia.
Quiénes son beneficiarios
En el caso de las deudas por electricidad, quienes podrán acceder a este beneficio son los clientes que tengan deudas generadas durante la pandemia, en este periodo de tiempo, y que hayan tenido un consumo promedio no superior a los 250 kWh al mes (equivalente a 38 mil pesos de la boleta con IVA incluido) y que sean clientes residenciales, hogares de menores y de adultos mayores, organizaciones sin fines de lucro y microempresas, entre otros.
Desde la Compañía General de Electricidad Distribución (CGE) explicaron que las deudas de estos clientes serán divididas en 48 cuotas, las que no podrán exceder el 15% del valor de su cuenta promedio mensual de 2021.
Los beneficiarios recibirán un subsidio estatal equivalente a ese mismo valor, por lo que los clientes sólo deberán pagar su consumo eléctrico mensual.
Desde la compañía enfatizaron que los beneficios otorgados se acabarán cuando no se efectúe el pago de la cuenta, por lo que es indispensable no encontrarse en condición de suspensión de suministro.