Fue el pasado 6 de enero cuando se perdió el rastro de Michelle Silva, joven de 20 años que se había reunido con un individuo, identificado como Claudio Figueroa, quien es el único detenido y principal sospechoso del brutal crimen ocurrido en San Felipe, región de Valparaíso.
El individuo, días después de la pérdida del rastro de la joven, confesó que él fue el autor del femicidio.
El individuo se habría reunido en su domicilio con Michelle Silva, luego de que se contactaran mediante la aplicación para citas Grindr, con el objetivo de comprar droga, donde ocurrió el asesinato de la joven.
Tras más de un mes del crimen, el 11 de febrero fue hallado el cuerpo de la joven en el Río Aconcagua.
Las pruebas tras reformalización por crimen de Michelle Silva
Según detallaron en LUN, durante la mañana del lunes, Figueroa fue reformalizado por la figura de femicidio con razón de género.
Existen varias pruebas contundentes que apuntarían en contra del único imputado, como la utilización de los celulares, ya que la georreferenciación de los artefactos del individuo y de la víctima lo sitúan en la casa de Figueroa, donde ocurrió el asesinato.
Asimismo, en la pieza del individuo se halló un lápiz labial que era propiedad de la víctima.
Según detallan en el medio citado, en septiembre de este año ocurrió una reconstitución de escena, donde el individuo volvió a "reconocer" su autoría en el crimen, pero apuntó a una "defensa propia", lo que buscarían desde la defensa que sea descartado.
Asimismo, en la investigación se analizaron las cámaras de seguridad, donde se aprecia cómo el individuo transportaba el cuerpo sin vida de Michelle Silva hasta el Río Aconcagua.
En primera instancia, el sujeto utilizó una bicicleta, pero luego optó por un carro de supermercado, ante las complicaciones por la movilización.
Por último, el relato de testigos es otra prueba contundente en contra de Figueroa.
Cabe recordar que cuando comenzó el juicio en su contra, su hermano y madre reconocieron que en su casa había "un olor putrefacto". Luego, vieron salir al imputado con un bulto.