En el contexto de la investigación del foco vinculado a los asaltos armados a camiones repartidores, registrados en el último tiempo en Arica, la Unidad de Análisis Criminal de la Fiscalía junto a la PDI lograron esclarecer un millonario autorobo en el que dos trabajadores de una empresa de distribución simularon un violento robo armado, apropiándose de la recaudación.
La indagatoria permitió detener a M. M. A., quien este martes fue formalizado en calidad de autor de los delitos de Obstrucción a la Investigación y Apropiación Indebida. En tanto, el segundo trabajador que también simuló haber sido víctima del asalto junto a una tercera persona que ocultó el dinero serán formalizados en los próximos días.
De acuerdo a los antecedentes expuestos en la audiencia, el pasado 3 de mayo M. M. A. junto a un compañero de labores de iniciales N.O.B., denunciaron que fueron interceptados en la vía pública por tres sujetos con su rostro cubierto y portando un arma de fuego, quienes procedieron a golpearlos y arrebatarles la recaudación del día de 7 millones 600 mil pesos, para luego darse a la fuga.
Tras la denuncia, la Unidad de Análisis Criminal de la Fiscalía dispuso una serie de diligencias investigativas por parte de funcionarios de la Biro, las que posteriormente permitieron detectar diversas contradicciones en el relato de ambas víctimas respecto del asalto.
“La investigación fue llevada a cabo por el equipo de la Brigada Investigadora de Robos de Arica quienes detectaron luego del análisis de los diversos medios de prueba tales como entrevistas a testigos, registros de imágenes, entre otros, que los dichos señalados por las víctimas no guardaban relación, por lo que nuevamente fueron reentrevistadas detectando inconsistencias, lo que llevó a que uno de estos reconociera la falsedad del hecho denunciado, haciendo entrega de la suma de un millón 300 mil pesos en efectivo. Posteriormente, se continuaron con las diligencias logrando la detención de la otra simulada víctima quien fue puesta a disposición del Juzgado de Garantía de la ciudad”, señaló el jefe de la Biro, comisario Juan Abarca.
El persecutor explicó que tras apropiarse de la recaudación, ambos trabajadores se contactaron y reunieron con la imputada de iniciales M.V.C., quien ocultó el dinero, el que posteriormente fue distribuido entre los tres y gastado casi en su totalidad.
