El oftalmólogo Carlos Schiappacasse, que se hizo conocido hace un mes por agredir a una asesora del hogar y a un perro lazarillo en un ascensor a través de un video virilizado en las redes sociales, reconoció su error y aseguró que sigue una terapia sicológica para controlar su “mal carácter”.
En una entrevista publicada este domingo por La Tercera, Schiappacasse calificó su actuar como “torpe” y aseguró que, si bien se reconoce como mal genio, nunca había tenido una actitud así. “Nunca he sido así de agresivo. Tuve un descontrol, fue irracional y me di cuenta, porque el mismo día ofrecí disculpas”, agregó.
Pese a hacer esfuerzos por reparar la situación, pues ofreció atención médica gratuita al Sindicato de Trabajadoras de Casas Particulares de Viña del Mar y apadrinó una casa de acogida de perritos, aseveró que la mujer agredida —Patricia— no ha querido hablar con él.
El médico de Viña del Mar, expresó que lo suyo no fue un acto de discriminación hacia la empleada, sino que su molestia fue con el animal pues, según dice, “mi problema fue con el perrito que estaba sin bozal y me asusté. Si hubiera sido un vecino habría reaccionado igual”.
El oftalmólogo explica que el momento más difícil en este último mes, fue “cuando el Sename anunció una investigación para ver la situación sicológica de mis hijas”, dijo.
Respecto a su situación laboral, Schiappacasse asume que destruyó en un segundo su carrera de 20 años. “El primer martes que volví a trabajar tenía un 80% de las consultas canceladas”, contó.
“El linchamiento virtual no es menos doloroso que el legal”, asegura el médico quien dice que nunca imaginó el poder de las redes sociales y pide que no se enjuicie a sus hijas, a su señora y cercanos.