En prisión preventiva quedó Bastián Llaitul Vergara y otros cuatro imputados por el ataque incendiario registrado en Quilleco, en la Región del Biobío.
Durante el incidente, cinco personas encapuchadas armadas amenazaron a conductores de camiones y luego incendiaron un camión en la ruta que une Los Ángeles con Antuco.
Luego incendiaron otro vehículo más y dejaron un lienzo en el que exigían la libertad de algunos detenidos por hechos de violencia. Fue tras eso que se pudo dar con su paradero, puesto que se inició un operativo policial que derivó en su detención.
Tras ser puestos a disposición de la Justicia, desde la Fiscalía solicitaron ampliar el arresto hasta este lunes, jornada en la que se concretó la formalización de cargos.
El fiscal Michelangelo Bianchi, jefe de la Unidad de Análisis de la Fiscalía del Biobío, señaló que "luego de una larga y extensa audiencia que se desarrolló en el Juzgado de Garantía de Los Ángeles se pudo formalizar la investigación tal cual lo habíamos planteado en la audiencia de ampliación de detención de la semana pasada y se logró la formalización de cinco imputados por los delitos de amenazas, incendio y homicidio frustrado en contra de funcionarios de Carabineros de Chile".
"Efectivamente se solicitó la medida cautelar de prisión preventiva en contra de todos los imputados, basado en la gravedad de los delitos por los cuales se estaba formalizando (...) se pidió por peligro para la seguridad de la sociedad, por diligencias pendientes, por seguridad de las víctimas y el Tribunal acogió nuestros planteamientos en el sentido de asegurar la comparecencia de los imputados", añadió al respecto.
Por otra parte, el fiscal Michelangelo Bianchi indicó que se sustentó la prisión preventiva por evidencia recogida durante la detención de los imputados, principalmente ligada a "vestimentas que tenía relación con la forma de comisión de los delitos, la forma de ocultamiento, la forma de efectuar el incendio".
Lo anterior, sumado a antecedentes como fotografías y análisis de celulares de los imputados, terminó por formar la "convicción en el Tribunal acerca de que estos imputados habían tenido participación como autores ejecutores en los numerosos delitos que formalizamos".
"En relación a la existencia de una imputada, efectivamente se encuentra con orden de detención. Esta surgió a propósito de estas pericias y los medios de prueba hallados al momento de la detención de los imputados", cerró el fiscal Michelangelo Bianchi.
Bastián Llaitul es sobrino de Héctor Llaitul, el líder de la Coordinadora Arauco Malleco (CAM).