En la audiencia de formalización contra los 18 imputados por el millonario robo a la empresa de valores Brinks, se conoció la forma en la que el guardia de seguridad, presuntamente implicado en el atraco, "avisó" que estaba ocurriendo el hurto en el lugar.
Según el propio relato del guardia, él le solicitó a su jefe estar en el lugar de las cámaras debido a que tenía problemas personales y necesitaba retirarse más temprano.
Cabe recordar que en ese lugar, conocido como torreta y encargado de activar la alarma en caso de emergencia, no se alarga tanto el turno de los funcionarios.
En primera instancia, según las cámaras de seguridad, el guardia revisa su teléfono simulando que había recibido un llamado, pero habría estado revisando un mensaje enviado por los autores del robo, confirmando la llegada de la camioneta con la que comenzarían el atraco.
Luego, abrió las puertas por solicitud de unas funcionarias, que querían ir a fumar afuera de la empresa.
En ese momento, el guardia de Brinks extrajo un segundo teléfono celular. En su relato, aseguró que estaba jugando con el dispositivo en el momento que comenzó el atraco.
Cuando se alertó de lo que estaba ocurriendo en el lugar, los individuos ya habían ingresado a la empresa.
Así "avisó" guardia de Brinks que estaban robando en la empresa
Luego, comenzó a simular que estaba tratando de impedir el atraco, según se detalló en la audiencia.
En primera instancia, según se relata en la audiencia, el funcionario intentó alertar que estaban robando simulando que apretaba el botón de emergencia, pero realmente habría oprimido en otro sector del aparato.
"Nunca aprieta al medio, sino que aprieta abajo. Eso precisamente era para que quede algún registro. Luego, tira el botón de pánico", es parte del relato de la audiencia.
Después, el funcionario simuló que había intentado realizar un llamado para combatir el asalto, pero su celular, según se aprecia en las cámaras de seguridad, seguía con la pantalla negra, sin desbloquear.
"Hace las veces como que intenta llamar, pero el celular siempre está oscuro, nunca brilla", siguieron en la audiencia.
Tras esto, se comenzó a agarrar la cabeza de manera 'desesperada' por el robo que estaba ocurriendo en ese momento en la empresa de valores.
En su lugar de trabajo, el guardia de Brinks contaba con un teléfono fijo con anexo, pero no fue utilizado en el momento del atraco.