Por Roberto Cox desde Buenos Aires
"Sí, la maté". Con estas palabras se refirió este jueves Lucas Azcona, el presunto asesino de la estudiante chilena Nicole Sessarego Borquéz muerta de 11 puñaladas en julio de 2014 en Buenos Aires, Argentina.
El enviado especial de T13 a Buenos Aires, Roberto Cox, confimó la información a través de su cuenta de Twitter.
Estas declaraciones se dan en el marco del jucio por la muerte de Sessarego, donde además han testificado presuntas víctimas de Lucas Azcona y peritos psiquiátricos.
El joven, de 23 años, se había negado a declarar y rechazó someterse de forma voluntaria a una extracción de sangre para cotejar su ADN con una mancha de sangre que no era de la víctima y que fue hallada en la escena del crimen.
No obstante, un juez ordenó tomarle una muestra en forma compulsiva, según fuentes de la investigación.
Azcona confesó a su padre y su hermana haber asesinado a la estudiante chilena, de 21 años, hallada el 15 de julio con 11 puñaladas y sus pertenencias intactas en la entrada del edificio donde vivía en Almagro, un barrio de clase media porteño.
El caso
Sessarego cursaba el cuarto año de Periodismo en la Universidad de Playa Ancha de Valparaíso y se encontraba desde febrero de 2014 en Argentina, donde realizaba un intercambio académico en la Universidad de Buenos Aires (UBA).
La universitaria salió con un grupo de amigos de noche a un club del centro de la capital donde realizaban una fiesta electrónica, se quedó hasta tarde y los amigos volvieron por separado.
La investigación policial incluye a un joven con el que la vieron hablar en el club, el taxista que la llevó de vuelta a su apartamento y el ex novio, informaron fuentes policiales a la prensa.
Este ex novio sería Lucas Azcona quien actualmente es sindicado como el autor material de las puñaladas que terminaron con la vida de Nicole. Los abogados querellantes intentan demostrar "odio de género" por parte del imputado.