En un fallo divido la Corte Suprema rarificó el no otorgamiento de beneficios a los condenados Miguel Estay Reyno y Claudio Fuentes Salazar, involucrados en el "caso degollados".
Ambos habían presentado un recurso de protección que ya había sido rechazado por la tercera sala de la Corte de Apelaciones de Santiago.
La intención de Estay y Fuentes era revertir la resolución de Gendarmería que había denegado beneficios penitenciarios.
En el fallo se detalla que el recurso de protección no se considera ya que "no se advierte ilegalidad o arbitrariedad en las tareas ejecutadas por el Tribunal de Conducta del Centro de Cumplimiento Penitenciario Punta Peuco".
Manuel Guerrero, Santiago Nattino y José Manuel Parada fueron asesinados durante marzo de 1975, en plena dictadura militar, y su caso cobró mayor importancia en la opinión pública luego de que el martes, la municipalidad de Providencia aprobara el presupuesto para la construcción de un memorial en el lugar donde fueron secuestrados.