La Cancillería chilena confirmó la muerte de una chilena que viajaba en el avión de Germanwings con destino a Dusseldorf que se estrelló en los alpes franceses el 24 de marzo.
La víctima, identificada como Ximena Patricia Alegría González, era madre de dos hijos de 20 y 15 años, había nacido en Concepción, tenía 44 años y estaba radicada en Venezuela. Según registros de ese país, estaba inscrita en un municipio de la ciudad de Barquisimeto, en la región de Lara del Oeste venezolano.
El Canciller Heraldo Muñoz señaló que la mujer trabajaba en el Ministerio de Transportes de Venezuela y que se están haciendo las gestiones para su repatriación.
Alegría estaba hace 20 días en Suiza por un viaje de trabajo y se desplazó hacia Barcelona durante el fin de semana para ver el clásico del fútbol español entre Real Madrid y el equipo local.
El embajador Hales señaló que unos amigos le compraron el pasaje en Barcelona para devolverse a Suiza.
El Director General de Asuntos Consulares e Inmigración chileno, Alejandro Marisio, dijo que "nos enteramos a través de un contacto que una amiga de la familia realizó con nuestro consulado en Madrid, informando que posiblemente había una chilena en el vuelo, lo que fue confirmado fue confirmado por las autoridades policiales de Barcelona".
"Nos pusimos en contacto con un hermano de la compatriota fallecida quien nos relató que efectivamente ella había viajado a un partido de fútbol y que lamentablemente había fallecido en el vuelo. Le expresamos a nombre del gobierno las condolencias y le ofrecimos toda la ayuda que pudieran requerir".
Según un documento público del Tribunal Supremo de Venezuela, Alegría se casó en 1992 con el venezolano Rafael Rodríguez, de quien se divorció en 2005.
